Un juez de la Corte Suprema ordenó transferir a las arcas del Estado brasileño 18,3 millones de reales (3,3 millones de dólares / 3 millones de euros) de cuentas bloqueadas de X y Starlink, empresas propiedad de Elon Musk, informó este viernes el tribunal.
La decisión fue tomada por el magistrado Alexandre de Moraes, instructor de un vasto proceso penal contra la diseminación de noticias falsas en redes sociales, en la cual figura como investigado el magnate sudafricano.
De Moraes dictó la transferencia de esos valores como “pago integral” de las multas impuestas a la red social X, suspendida en el país desde el 31 de agosto por negarse a eliminar una serie de perfiles que, según las autoridades, se dedican a desacreditar las instituciones democráticas con informaciones falsas.
El fallo es del miércoles, pero el Supremo solo lo divulgó este viernes, un día después de que los bancos -Itaú y Citibank- en los que X y Starlink tenían el dinero confiscado comunicaran que habían realizado la transferencia a las arcas del Estado brasileño.
Ejecutada la decisión, De Moraes levantó el embargo que pesaba sobre las “cuentas bancarias y activos” de ambas compañías de forma “inmediata”.
Esos valores habían sido bloqueados previamente por decisión de De Moraes para hacer frente a las multas impuestas a X “por no retirar” perfiles sospechosos, “además de haber retirado sus representantes legales en Brasil, lo que llevó a la suspensión del funcionamiento” de la plataforma.
Algunos de esos perfiles pertenecen a blogueros y voceros de la ultraderecha que lidera el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022), también investigado por difundir noticias falsas, atacar las instituciones democráticas y conspirar para dar un golpe de Estado.
Entonces, De Moraes justificó el también embargo de las cuentas de Starlink “por responsabilidad solidaria” al considerar las empresas de Musk como “un grupo económico de facto”, argumento criticado por una parte del mundo jurídico.
El pulso entre De Moraes y Musk empezó meses atrás y ha movilizado a los simpatizantes de Bolsonaro.
Musk y Bolsonaro han tachado de “dictador” a De Moraes, que se ha convertido en el enemigo número uno de la extrema derecha brasileña.
El sábado pasado, Día de la Independencia de Brasil, unos 45.000 brasileños se manifestaron en la céntrica Avenida Paulista de São Paulo para exigir la destitución de De Moraes, uno de los once magistrados que integran el Supremo, en una protesta que lideró el propio Bolsonaro.