Las autoridades colombianas detuvieron en Bogotá al venezolano Carlos Escobar, conocido como ‘Carlos Ramón’, miembro de la banda transnacional Tren de Aragua; buscado por las autoridades de su país por participar en el asesinato de nueve policías.
“¡Cayó presunto homicida de nueve policías en Venezuela! En Bogotá capturamos a Carlos Ramón Escobar García, requerido en su país por su posible participación en la muerte de uniformados en el estado de Aragua, afirmó este jueves el director de la Policía colombiana, general William René Salamanca, en la red social X.
Según las autoridades, Escobar, de 33 años, era subordinado de Héctor Guerrero, alias ‘Niño Guerrero’, máximo líder del Tren de Aragua.
Asimismo, era buscado con circular roja de la Interpol por Venezuela para comparecer ante el Circuito Judicial Penal del estado de Aragua por los delitos de extorsión, tráfico de armas de fuego y resistencia a la autoridad, detalló la Policía colombiana en un comunicado.
Según las autoridades, también participó en “cinco delitos de alcance transnacional” como “homicidio intencional calificado y homicidio calificado en ejecución de robo agravado”. Estos cargos, lo convierten en uno de los 10 hombres más buscados de Venezuela.
Detención de Escobar
La Policía seguía el rastro del sujeto hace más de 60 días, el cual estaba delinquiendo en el barrio de Madelena, en el sur de Bogotá; donde se dedicaba a la venta de drogas y a la extorsión.
“En el momento de su retención esta persona se identificó como ‘Andrés García’, de nacionalidad colombiana, con el propósito de evadir el control de las autoridades”, agregó la Policía.
Sin embargo, el grupo de investigadores tenía evidencia clara que lo identificaban como un “peligroso delincuente”, agregó la información.
El hombre fue puesto a disposición de la Fiscalía, que tramitará su extradición a Venezuela.
La banda criminal Tren de Aragua es señalada por las autoridades de Bogotá como una de las responsables del aumento de la violencia en la ciudad, principalmente con robos, extorsiones y homicidios.
El grupo nació en las cárceles de Venezuela y se ha extendido por varios países latinoamericanos, como Colombia, Perú, Bolivia y Chile, donde las autoridades la acusan de cometer numerosos delitos, como narcotráfico, extorsión, secuestros y homicidios.