Una jornada de furia fue lo que vivió el mandatario argentino, Javier Milei, luego de la última votación realizada en la Cámara de Diputados respecto de la Ley Ómnibus y donde el oficialismo se vio desfavorecido. "Ir con buenas intenciones no da resultado. Los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos", exclamó Javier Milei.

Una tensa jornada se vivió este jueves dentro del gobierno argentino cuando el presidente libertario, Javier Milei, desató su furia durante una reunión de Gabinete y le aseveró que “ir con buenas intenciones no da resultado, los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos”.

Lo anterior se da en medio de la discusión por la aprobación de la Ley Ómnibus que levantó Milei.

Según lo constató el diario Clarín, el actual presidente de Argentina siguió de cerca las negociaciones que el oficialismo mantuvo con los legisladores durante este miércoles.

Se trata de una disputa mediática que fue apoyada por su ministro de Economía, Luis Caputo, en contra de gobernadores provinciales que rechacen “algún artículo” del proyecto.

Fue bajo este contexto en el que dijo que: “Los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos”.

La prensa argentina detalló además que fue una frase que el mandataria exclamó “sin mayores rodeos” ante la atenta mirada de sus ministros, luego de que trascendiera el conteo de votos que reveló un escenario complejo para oficialismo.

Se trata de dichos que se condicen con las palabras expresadas por el ministro Caputo, quien este pasado miércoles -y en medio del primer paro nacional al que se enfrentó el nuevo gobierno derechista- expresó que ya se están revisando “todas las partidas provinciales que se recortarán inmediatamente si alguno de los artículos económicos es rechazado”.

“No es una amenaza, es la confirmación (de) que vamos a cumplir con el mandato que nos han dado la mayoría de los argentinos de equilibrar las cuentas fiscales para terminar con décadas de inflación y flagelo económico”, dijo la autoridad argentina.