César Suárez, el fiscal de Ecuador que investigaba el reciente ataque armado al canal TC Televisión, fue asesinado este pasado miércoles 17 de enero en Guayaquil.
Todo lo anterior, bajo el marco de una sangrienta escalada de la guerra que vive el país con las bandas criminales transnacionales.
Según lo han dado a conocer los medios locales de Guayaquil, el fiscal Suárez fue atacado a disparos por un grupo de sicarios cuando circulaba con su vehículo y tras abandonar su oficina.
Se trata de un hombre oriundo de la ciudad ecuatoriana de Paján, en la provincia de Manabí. Tenía 38 años y dos hijas menores de edad, era un padre de familia que desde ese fatídico miércoles es considerado un mart ir de la delincuencia organizada.
El fiscal se graduó como abogado de la Universidad de Guayaquil en 2010 y no contento con ese logro, el hombre estudió más tarde una maestría en Derecho Constitucional, Derecho Penal, Derecho Procesal y Criminalística.
Según lo dio a conocer el medio Primicias, en medio de toda su trayectoria logró obtener sentencias contra personas implicadas en asesinatos, feminicidios y casos de sicariato.
Es por esta excelente carrera judicial que se le llegó a conocer como el fiscal anti-mafias de Ecuador.
También estuvo detrás de investigaciones que destaparon escándalos de corrupción en el sistema hospitalario y realizó otras pesquisas en organismos judiciales.
Carrera y logros del fiscal César Suárez
En 2009, llegó al ente judicial para desempeñarse como asistente de la Fiscalía de Guayas, a cargo de la recepción de denuncias, versiones y despacho de expedientes.
Nada más 5 años después fue designado como fiscal del cantón Jipijapa, también en Manabí.
De 2015 y 2018 fue fiscal de la unidad de Personas y Garantías, de la ciudad de Manta. En esa época, el fiscal empezó a recibir amenazas.
Según medios ecuatorianos, en julio de 2017 apareció un panfleto en el que ofrecían un millón de dólares por la vida del fiscal.
El fiscal dirigió investigaciones que destaparon la infiltración de mafias en el sistema judicial y escándalos de corrupción en la compra de insumos médicos durante la pandemia de covid-19.
Entre los condenados en 2021 por este último caso se encontraba el empresario Daniel Salcedo, quien solo cumplió dos de los 13 años a los que fue sentenciado y se benefició de una decisión judicial que le concedió la libertad.
De hecho se trató de un hombre que además estuvo involucrado en el caso ‘Metástasis’, que reveló en diciembre los vínculos entre un poderoso narcotraficante con jueces, fiscales y policías.
Se trata del mayor caso de corrupción destapado en la historia de Ecuador.
Los fiscales han estado en la mira de las más de veinte organizaciones criminales que operan en Ecuador. En junio del año pasado, el fiscal Leonardo Palacios fue asesinado en la localidad de Durán, vecina de Guayaquil.
Delicadas investigaciones
El fiscal César Suárez, que se había hecho popular al liderar investigaciones sobre corrupción en hospitales durante la pandemia, tenía entre sus manos la investigación del asesinato de dos policías.
Además tenía una serie de atentados a infraestructura policial en Durán bajo su lupa, aparte de un municipio del área metropolitana de Guayaquil donde son fuertes los ‘Chone Killer’.
Recientemente el fiscal Suárez había interrogado a los trece detenidos, entre ellos dos menores, sobre ese caso atribuido por la Policía a la banda criminal ‘Los Tiguerones’, mientras que también llevaba casos de narcotráfico y corrupción.
Por su parte, José Serrano, exministro del Interior durante el mandato presidencial de Rafael Correa (2007-2017), señaló en redes sociales que Suárez había solicitado información sobre el entorno familiar de José Adolfo Macías Villamar ‘Fito’, el líder de la banda ‘Los Choneros’, fugado de prisión semanas atrás.
Esto hizo que la Fiscalía anunciase que abriría una investigación a Serrano por presunta información reservada, a lo que este insistió en que era necesario investigar quién filtró información sobre las investigaciones de Suárez a la banda que lo mandó matar.