Personas jóvenes, varones, del sector adinerado y más pobre de Argentina. Estudiantes, de los que estudian y trabajan, pero más de los que solamente estudian. Esta es la descripción simplificada de los votantes de Javier Milei, o al menos la representación de un gran porcentaje. El economista autodenominado libertario tiene una misión hasta llegar al balotaje, y es cautivar a un sector de la población que le tiene miedo a su motosierra.
El economista libertario, Javier Milei, pasó a la segunda vuelta electoral de Argentina contra el actual ministro de Economía del país, el peronista Sergio Massa.
Uno de los dos será el próximo presidente de Argentina hasta finales del 2027.
Massa tiene claro a su electorado, el sector trabajador de izquierda, peronistas e incluso kirchneristas, los cuales son sectores muy populares de el país vecino.
Y frente a esto es que surge la duda sobre quiénes son los votantes de Milei, cuál es el sector de la población argentina que más representado se ve por este político.
Recordemos que el caudal de votos obtenido por el economista en las PASO fue de un 29,86% de los sufragios, mientras que en las elecciones generales obtuvo un 30,06%, que se traduce en 7.738.332 votos.
Sergio Massa obtuvo 36,42%, que son 9.127.071 votos.
Es respecto de esta incógnita que el medio Télam consultó a un grupo de expertos sobre cuál es el espectro político del candidato derechista.
Todos ellos coinciden en que el factor común de estos votantes es la crisis económica que comenzó en 2008 y que se administró sin una buena resolución.
Todo esto generó un proceso sostenido de “desafección política” y derechamente rabia.
Así es cómo creció el fenómeno de la “antipolítica”, el cual acuñó Milei en su campaña y logró cautivar a un grupo etario bastante golpeado por las crisis internas de Argentina: los jóvenes.
Además existe otro detalle importante: en estas elecciones votaron por primera vez aquellos que nacieron entre 2007 y 2008, que crecieron en una sociedad carente y con una economía que nunca tuvo una inflación menor al 20% anual.
¿Quién vota a Javier Milei?
La encuesta titulada “Radiografía del votante PASO” elaborada en septiembre pasado por la consultora Taquion Research fue realizada para indagar sobre la composición del electorado de los candidatos presidenciales.
Allí se obtuvieron 1.793 respuestas de mayores de 18 años mediante cuestionarios online, entre el 29 de agosto y el 2 de septiembre.
En esa instancia, el candidato de La Libertad Avanza se quedó con 29,86% de los sufragios.
De este porcentaje, Milei fue elegido por el 9,1% de los jubilados y el 24,9% de los estudiantes, sobre todo de los que solo estudian (16,9%) y no los que además trabajan (8%).
Según detalla la prensa argentina, esto “era de esperarse” por el fuerte arraigo de las ideas libertarias entre los más jóvenes.
De hecho, el 29% de sus votantes fueron de la Generación Z, que tienen entre 16 y 29 años. A ellos les siguiero Millennials de entre 30 y 42 años y un 26,1% de la Generación X.
Además, el 63,6% de sus electores fueron varones y tan solo un 36,4% fueron mujeres.
Entre sus electores, un 66,7% son de un nivel socioeconómico bajo, el 26,4% de case media y solo el 6,9% del más alto medido por la consultora argentina.
¿Jóvenes de qué sectores socioeconómicos?
Los especialistas en opinión pública ven con asombro cómo el fenómeno de Milei atrae a jóvenes e interpela a sectores de la sociedad que identifican el problema de la Argentina en “la casta política”.
Según lo detalla el diario La Nación, todos ellos buscan canalizar sus “frustraciones” en un referente sin experiencia en la gestión.
El núcleo duro de intención de voto del libertario se encuentra entre personas de niveles educativos intermedios, principalmente varones jóvenes y de clase media baja.
“Una sociología de votantes muy diferente a la de Pro”, dijo el politólogo Pablo Touzon, consultado por la prensa del país.
La sensibilidad antipolítica y el fuerte rechazo al intervencionismo estatal son dos de las claves para comprender la adhesión a Milei, que van de la mano de un sentimiento de profundo desasosiego.
Se trata de gente muy enojada con la política y los políticos actuales.
“Milei es una figura que no apela tanto al voto de derecha sino al voto de la frustración y el hartazgo con la política en general”, indica Shila Vilker, de la consultora Trespuntozero, para quien la dolarización es un “eslogan” y “una etiqueta sin tanto contenido explicativo”.