Uno de los detenidos desaparecidos denunciados en el marco del Régimen de Excepción, fue encontrado meses después en una fosa común: "Lo enterraron como un animal". Era un joven con discapacidad mental.
Es todo lo popular que se propuso ser, desde que salió del FMLN, el partido con el que Nayib Bukele fue dos veces alcalde, hasta que en 2018 fue expulsado, luego de desmanes internos, según sectores políticos tras negarle la candidatura a la presidencia de la república para el periodo 2019-2024.
5 años han pasado después de eso, 4 desde su gobierno y un régimen de excepción que lleva año y medio siendo extendido por su partido Nuevas Ideas, con mayoría en la Asamblea Legislativa.
Si bien, el mandatario salvadoreño goza de gran aceptación, según las encuestas en el país centroamericano, también enfrenta críticas locales e internacionales por no respetar la separación de los poderes de Estado.
Y es que, además de tener la llave en el legislativo, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia le confeccionó una enmienda, a la medida, para reelegirse en 2024.
En El Salvador, la Constitución prohibe la reelección inmediata de un jefe de Estado tras su primer periodo en el poder. Sin embargo, Bukele se apresta a renunciar a finales de año para lanzar posteriormente lanzar su candidatura.
Además de la resolución de los magistrados judiciales, se ampara en la idea de dar continuidad a su guerra contra las maras o pandillas, pese a que en el pasado, investigaciones de El Faro, medio salvadoreño, lo vincularon a un pacto con tres de estos grupos delictivos.
En el presente, se anexa otro ingrediente a las denuncias de violaciones a los derechos humanos en el marco de esta guerra: los detenidos desaparecidos en El Salvador, o Tres formas de desaparecer bajo el régimen de excepción de Nayib Bukele, como lo denomina el medio español El País.
A Henry Joya lo sacó la policía de El Salvador de su casa por presunta vinculación con las maras. Su familia, tras meses sin noticias buscando su nombre en los registros penitenciarios, empezó a buscarlo en los registros forenses. Y encontraron su cadáver https://t.co/MzLwKV4ZNq
— EL PAÍS (@el_pais) August 14, 2023
El joven con discapacidad mental, detenido en su casa, desaparecido en una cárcel
Como una persona servicial. Así catalogaron a Henry Joya sus vecinos de la colonia Luz, un conocido barrio de San Salvador que vio crecer a la estrella internacional del fútbol Jorge “Mágico” González.
Los tiempos cambiaron para muchos, sobre todo, para jóvenes como Joya. La madrugada del 22 de abril del año pasado, la Policía Nacional Civil lo sacó de su vivienda, tras acusarlo de pertenecer a pandillas de dicha zona.
Los habitantes del lugar y su familia explicaron que se trataba de alguien con discapacidad mental. De todos modos, se lo llevaron. Al cabo de unos días sin saber de él, lo ubicaron en el Penal La Esperanza, también conocido como Mariona, ubicado en el gran San Salvador.
En un inicio, la familia de este detenido supo de su situación a través de información que le entregaban los custodios. No podían verlo, pero como otras personas en su situación en varias cárceles del país, asomaban a la fachada del lugar, hasta que un día la información dejó de fluir.
Pasaban los días, las semanas y nadie les daba información del paradero de Henry. De hecho, su hermano, Jesús Joya, se enteró que no figuraba siquiera en el listado de los presos en ese penal. La familia Joya emprendió una búsqueda desesperada cárcel por cárcel. Su ser querido integraba ya la lista de detenidos desaparecidos en El Salvador.
Al no tener información de su hermano, a Jesús se le ocurrió ir al último lugar donde un familiar busca a otro: el Instituto de Medicina Legal (IML). Cuando dieron los datos del joven, salieron una serie de fotos de fallecidos en la soledad máxima. En una de estas, identificaron la cara de Henry, en un momento devastador para cualquier grupo familiar.
A Henry lo ubicaron el 19 de septiembre, a 5 meses de su captura y posterior desaparición. Sin embargo, en el IML les confirmaron que la fecha de su deceso fue casi tres meses antes. La familia pidió la exhumación y el reporte arrojó por causa de muerte un edema pulmonar.
“Sin embargo, un testigo que compartió celda con él en el centro penitenciario Mariona, comunicó a la familia que había sido sometido a fuertes golpes de parte de los custodios y que murió a consecuencia de estos”, fue el reporte de la fundación Debido Proceso. Esta y otras más entregaron casos como el de Henry joya a al Comité contra la Desaparición Forzada y al Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas de las Naciones Unidas.
Detenidos desaparecidos en El Salvador: 3 formas de ocurrir en el país de Nayib Bukele
Henry Joya ahora es un número más en la política de seguridad, con un régimen de excepción, que la gente apoya, en su mayoría, hasta que viven en carne propia lo que se siente ser familiares de detenidos desaparecidos en el país de Nayib Bukele.
En organizaciones como Debido Proceso, las denuncias son alarmantes. Según consignó El País, las detenciones (sobrepasando las 71.000) en un año y medio de la política de seguridad que restringe las garantías constitucionales de los aprehendidos, se han denunciado 5.490 “víctimas directas”, que no pertenecen a pandillas, 13.581 “hechos violatorios” hasta el mes pasado y la detención arbitraria que encabeza la lista con el 95%.
Primera forma de desaparición: “los familiares reciben alguna información que les permite encontrar a la persona detenida en un centro penitenciario”, resalta el medio español, con ayuda de la organización antes mencionada, entre otras 5 más que brindan información al respecto.
Segunda forma de desaparición: (después) “de varias semanas o meses, y pese a la insistencia de familiares y a la interposición de habeas corpus, los familiares no tienen ninguna noticia de la persona detenida”. “Este parece ser el patrón más frecuente según las denuncias recibidas en las organizaciones suscriptoras de este documento”, según el informe.
Tercera forma de desaparición: “Son, igualmente, personas capturadas por la policía o militares, en aplicación del estado de excepción, en lugares públicos, en presencia de testigos, y posteriormente sus familiares se trasladan a distintos centros policiales a solicitar información y se reconoce oficialmente que la persona ha sido capturada y enviada a un centro penitenciario”.
No obstante a lo anterior, el documento sostiene que la persona no tiene información de las autoridades o comunicación con la persona detenida, como en el caso de Henry Joya.
Se detalla que “tras varios meses de buscar nuevamente a su ser querido, se dan cuenta a través del Instituto de Medicina Legal o por personas particulares, como por ejemplo una empresa funeraria, que su familiar falleció en el centro penal. Muchas de estas personas son enterradas en fosas comunes, antes de que sus familiares se enteren de su muerte”.
A Henry lo encontraron, precisamente, en una fosa común en el capitalino cementerio La Bermeja. Fue sepultado como un sin nombre y abandonado.
“Lo habían sepultado como un animal, como un desconocido”: hermano de Henry Joya reo al que desde finales de mayo dieron como desaparecido en el penal de Mariona https://t.co/IvlwmmfJmS
— Jorge Beltrán Luna (@Jbeltranluna_) October 20, 2022
Las cifras de detenidos desaparecidos con el régimen de excepción de Bukele
Los medios de comunicación en El Salvador (los que no están alineados a las políticas del presidente Nayib Bukele), se han dado a la tarea de investigar este fenómeno que ocurrió en dictaduras como Chile y Argentina, durante sus gobiernos militares.
El sitio de prensa de investigación, Focostv, conversó con la organización de defensa de derechos humanos, con más de 20 años de experiencia en El Salvador.
Las cifras de detenidos desaparecidos, que salieron a la luz, dan cuenta de una realidad que se esconde a las sombras de la popularidad del mandatario salvadoreño, pero que tienen a cientos de familias esperando por noticias de sus seres queridos acusados de mareros o pandilleros, capturados, sin ser vencidos en juicio.
“Entre marzo de 2022 y febrero de 2023, la organización Cristosal registró 189 denuncias por desaparición forzada de corto plazo de personas detenidas arbitrariamente en el marco del régimen de excepción”, asegura el citado medio.
La publicación hace énfasis en que si bien los familiares se enteraron semanas o meses después dónde estaban recluidos sus seres queridos, en una docena de casos, sólo registrados en esta organización, aún no saben nada de su paradero.
Se trata de una medida que tiene a los organismos internacionales, como Naciones Unidas, entre otros, revisando lo que ocurre en un país donde más de 150 personas han fallecido en las cárceles, tras ser detenidos sin el debido proceso, sin ser declarados culpables.
Ante la ausencia del debido proceso, sólo hay detrás la estigmatización de vivir en una zona donde operaron estas estructuras delictivas, procedimientos policiales y militares arbitrarios y una sociedad que en parte, celebra una medida punitiva, hasta que la sufre en su núcleo, porque terceros levantaron falso testimonio en su contra, en algunas ocasiones.
#VíctimasDelEstado | Las nuevas reformas penales profundizan la arbitrariedad del sistema de justicia. #PodríasSerTú
➡️🧐Lee nuestro análisis al respecto en este enlace: https://t.co/Zp9cX7A774 pic.twitter.com/AlZB96gO49— Cristosal (@Cristosal) August 10, 2023