El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este lunes, al lado de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, que fue “lo más absurdo” que países democráticos en Europa y América reconociesen al opositor Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela.
Lula dijo que “peleó” con líderes socialdemócratas europeos y con políticos de Estados Unidos y de los países americanos por el reconocimiento de Guaidó.
Recordemos que se trató de un nombre que también fue reconocido como presidente por el Gobierno del entonces mandatario brasileño, Jair Bolsonaro.
“A los europeos les decía que no comprendía que un continente que ejercía la democracia tan plena como Europa pudiese apoyar la idea de que el impostor fuese el presidente”, recalcó Lula, en alusión a Guaidó.
El mandatario brasileño recibió a Maduro en el palacio presidencial de Planalto en la víspera de la cumbre suramericana convocada para este martes.
Fraternidad entre Lula y Maduro, pero hostilidad contra Guiadó
Lula subrayó que todavía hoy continúa habiendo “prejuicios” contra Venezuela, que prometió superar fomentando la “integración plena” entre ambos países.
Además, el brasileño calificó como “histórica” la visita de Maduro a Brasil después de ocho años sin viajar al país vecino.
Tras esto defendió estrechar las relaciones bilaterales a todos los niveles: comercial, cultural, académico y militar, para combatir al narcotráfico.
En el aspecto comercial, recordó que el flujo comercial llegó a 6.000 millones de dólares y ha caído a cerca de 2.000 millones con el alejamiento político fomentado durante el Gobierno de Bolsonaro, líder de la ultraderecha brasileña.
No obstante, admitió que “este nuevo tiempo” que se abre con la visita de Maduro a Brasilia no va a servir para “superar todos los obstáculos” que se crearon en los últimos años.
Lula recibió este lunes con honores de Estado a Maduro, quien visita Brasilia por primera vez desde 2015, en la víspera de la cumbre de presidentes suramericanos.
A la cumbre han sido invitados los presidentes de los otros once países suramericanos (Argentina, Bolivia, Chile, Venezuela y varios más) para un cumbre regional.
Nicolás Maduro fue el primero en llegar a Brasilia.