Según consigna el medio local Caracol, el gobierno colombiano solicitó dos ofertas para aeronaves y otras dos para armamento, las que recientemente fueron respondidas por Washington.
Es así como la potencia norteamericana, a través de la compañía Lockheed Martin, hizo una primera oferta a Colombia de 24 aviones F-16 a un valor de 108,14 millones de dólares cada uno más su componente de entrenamiento.
El paquete incluye además simuladores y mantenimiento por tres años, lo que a su vez implicaría la llegada de contratistas de Lockheed Martin a Colombia para operar el componente.
Si el gobierno colombiano se decanta por esta opción, tendría que desembolsar un total de 4 mil 202 millones de dólares. Los tres primeros aviones llegarían en 2028, 17 lo harían en 2029 y los últimos 4 arribarían en 2030. Esto, siempre y cuando Colombia acepte antes de julio próximo.
Por su parte, la segunda propuesta es de 16 aviones F-16 a un costo de 112 millones de la divisa norteamericana cada uno.
Sin embargo, el valor del paquete completo asciende a los 3 mil 132 millones de dólares, lo que incluye software, capacitaciones en ingeniería y desarrollo además del esquema de seguridad para el almacenamiento de partes y armamento sensible -incluyendo la construcción de hangares-, lo que sería llevado a cabo por norteamericanos.
Lo anterior en cuanto a los aviones propiamente tal, ya que en el caso del armamento se manejan ofertas diferentes. La primera es por los misiles de ataque Harpoon, que no vienen incluidos en los aviones, y que tienen un costo de 177,8 millones de dólares.
La segunda propuesta es para misiles de tipo JSOW y tiene un valor de 225,6 millones de dólares.
En ambos casos los paquetes incluyen además sus componentes técnicos, asistencia y mantenimiento, según detallan medios especializados como Info Defensa.
Eso sí, hay que consignar que la firma sueca Saab y la francesa Dassault también están compitiendo con sus aviones Gripen y Rafale, respectivamente, para renovar la flota colombiana.
Bondades del F-16
Desarrollado en los años ’70 por General Dynamics para la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el F-16 fue evolucionando con los años hasta convertirse en un caza multiuso.
Una de sus principales innovaciones es que fue el primer caza de combate capaz de soportar giros de 9G, lo que fue explicado a BioBioChile en 2022 por el comandante de escuadrilla aire Manuel Peralta, piloto de F-16 que pertenece al Grupo de Aviación N° 7 que está asentado en la ciudad de Antofagasta.
“Es un entrenamiento continuo que se hace en Estados Unidos en donde uno va a una cámara centrífuga y somete el cuerpo a 9G en diferentes condiciones de vuelo en diferentes perfiles. El piloto entrena su capacidad para soportar la fuerza G y entrena la maniobra”, contó en el marco de la FIDAE.
“Es un avión muy versátil con una gran maniobrabilidad. Tiene la particularidad que permite llevar armamento tanto aire-superficie como aire-aire, con lo cual le da una característica de multirol y poder ejecutar misiones de manera simultánea en ambos sentidos”, mencionó.
“Además cuenta con la capacidad de reabastecimiento en vuelo, lo que le extiende la permanencia en el aire”, enfatizó.