Uno de los principales objetivos de las conversaciones, que podrían durar tres semanas, es lograr un alto el fuego bilateral. También queda por definir cómo se involucrará a la sociedad civil en la construcción de paz.
El Gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) iniciaron este lunes en Ciudad de México el segundo ciclo de negociaciones de paz.
“Estamos aquí con el impulso que ha dado el presidente colombiano Gustavo Petro a la paz como política de Estado”, aseguró Otty Patiño, jefe de la delegación del Gobierno de Colombia.
Lo anterior, en la inauguración de la mesa de diálogo en la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS) de Ciudad de México.
Patiño remarcó que en esta ronda será fundamental “producir hechos”, al subrayar que “lo que se acuerda en la mesa se implementa en los territorios”.
Objetivo principal: alto el fuego
El punto clave de las conversaciones, que se espera se prolonguen por tres semanas en México, será alcanzar un acuerdo para el alto el fuego por ambas partes.
“Nuestra agenda busca transformaciones y poner fin al conflicto armado, con la determinación de lograr un paz integral y duradera”, afirmó Pablo Beltrán, jefe de la delegación del ELN.
Beltrán indicó que se hablará de los “preparativos” de un “cese el fuego bilateral, temporal y nacional”.
Otro de los puntos que será abordado en México es el referente a la participación de la sociedad en la construcción de la paz, que no ha sido explorado.
Aunque ambas partes quieren involucrar a las mujeres, la sociedad civil y el campesinado, hay visiones diversas sobre cómo hacerlo.
"El derecho universal garantizado es un modelo muy diferente a lo que hemos vivido como sociedad colombiana en las últimas décadas; estos proyectos de ley que van a ser discutidos, lo que le proponen a la sociedad es salir del neoliberalismo": Presidente @petrogustavo. pic.twitter.com/PoKZ6mSL6R
— Presidencia Colombia 🇨🇴 (@infopresidencia) February 13, 2023
Esperanza y cautela entre Colombia y el ELN
Fuentes cercanas a las conversaciones señalaron a la agencia EFE que hay un prudente optimismo acerca de la evolución de este nuevo ciclo, pero reconocieron la enorme complejidad que rodea al conflicto colombiano.
Por su parte, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, calificó el encuentro como “una fecha histórica para la reconciliación en Colombia” y mostró su orgullo de que su país sea anfitrión de este nuevo ciclo de conversaciones.
Las negociaciones entre el Gobierno colombiano y el ELN, que estuvieron interrumpidas durante cuatro años tras comenzar en 2017, se reanudaron el pasado 22 de noviembre en Caracas con el auspicio de Cuba, Noruega y Venezuela como países garantes.
Aunque el presidente Petro anunció el 31 de diciembre la entrada en vigor del alto el fuego bilateral, la guerrilla lo desmintió días después con el argumento de que no se había acordado en los diálogos.
México, junto con Venezuela, Chile, Noruega y Brasil, son garantes de los diálogos de paz, mientras que Suecia, Alemania, Suiza y España actúan como países acompañantes.