Tras confirmar el hallazgo de un aparato sobre sus cielos, el Pentágono de Estados Unidos ha detectado un segundo globo espía chino, pero esta vez sobre América Latina.
Respecto del primero, China finalmente afirmó que se trata de un dispositivo suyo al que se le había perdido el rastro.
En cuanto al segundo, no obstante, al cierre de esta edición, Beijing todavía no confirma ni desmiente nada al respecto.
Hasta hoy sábado las autoridades chinas solo han divulgado comunicados dedicados a aclarar la situación creada por la aeronave que sobrevolaba Montana.
Medios oficialistas como la cadena estatal CCTV, la agencia de noticias Xinhua ni los diarios del Pueblo, Global Times o China Daily tampoco hacen mención alguna del objeto volador blanco que, según el diario La Nación de Costa Rica, estaba sobrevolando su espacio aéreo.
Por su parte, si un usuario realiza una búsqueda en Weibo -equivalente a Twitter, censurada en China – usando con caracteres chinos las palabras “globo” o “aeronave” unidas al término “Latinoamérica” solo aparecen tres publicaciones sobre el anuncio de ayer por parte de EEUU.
El descubrimiento del primero de estos “globos espías” en el espacio aéreo estadounidense ha desencadenado una crisis diplomática entre Washington y Pekín y ha motivado la suspensión del viaje que el secretario de Estado, Antony Blinken, tenía previsto hacer al país asiático este fin de semana.
Pekín admitió ayer viernes que el globo sobre EEUU le pertenece, aunque aseguró que “es un dirigible civil utilizado con fines de investigación, principalmente meteorológicos”.
Tras el anuncio, el director de la Oficina de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi, mantuvo una conversación telefónica con Blinken, en la que pidió a EEUU “mantener la calma, comunicarse a tiempo, evitar errores de juicio y controlar las diferencias”.