EFE

Nayib Bukele: un presidente y un régimen que nacen desde la desesperación

11 diciembre 2022 | 06:55

Más de 56.000 detenciones desde marzo, un gobierno que se rehúsa a rendir cuentas con organismos internacionales, centenares de acusaciones de vulneraciones de derechos humanos y un presidente joven que insiste de manera implacable en su guerra contra las pandillas. En BioBioChile te contamos todos los detalles del polémico presidente de El Salvador, Nayib Bukele.

Nayib Bukele, un presidente que lidera actualmente una batalla sin límites en El Salvador por lograr pacificar el país, cuenta con el apoyo de muchos salvadoreños pero también con detractores dentro y fuera del país.

Un presunto acuerdo (y posterior quiebre) del gobierno con la organización de pandilleros Mara Salvatrucha (MS) fue lo que detonó en marzo de este año un régimen de excepción.

Sin preguntar antecedentes, sin una orden de arresto y “sin criterio alguno” la policía y milicia de El Salvador tiene la facultad de arrestar a cualquier persona que sea sospechosa de pertenecer al crimen organizado.

Desde el Gobierno se jactan de convertirse en uno de los países más seguros de América Latina, deteniendo hasta el momento a más de 57.000 personas.

Esta semana el mismo Bukele “celebró” por medio de Twitter la detención de 140 presuntos pandilleros en menos de dos días.

“Está claro que los que se oponen a esto, están en contra de los derechos humanos, de los salvadoreños, de la paz, de la libertad y de la justicia”, comenta el presidente de El Salvador en sus redes.

“Un presidente que nace de la desesperación”

Para profundizar el tema, BioBioChile se comunicó con una periodista salvadoreña que reside en Chile, Paola Alemán, quien entregó detalles de este poco convencional mandatario.

Para ser uno de los líderes latinoamericanos más jóvenes actualmente, se le puede llegar a considerar un hombre muy conservador, debido a la realidad de su país.

“Él (Bukele) se cuida mucho de no tener posturas claras respecto a temas controversiales. El Salvador es un país católico y de tradición religiosa”, comenta Paola.

“Eso es lo que le gusta al salvadoreño promedio, además del tema de la seguridad en las calles”, agregó.

“Para mí, Nayib Bukele es una figura que nace de la desesperación del salvadoreño por una mayor seguridad pública”, explicó Paola.

“La herencia del salvadoreño es tener violencia en su ADN, porque la guerra civil y todo lo consiguió, fue con el tema de las armas. El salvadoreño que no tomó las armas, se acostumbró a ver violencia a su alrededor”, comentó.

“Luego nacieron las pandillas por el mismo descuido social de los gobiernos que llegaron con los acuerdos de paz y no se preocuparon por educar a la población. Ahí es donde nacen figuras como Bukele”, dijo la periodista salvadoreña.

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, presentó a 14.000 efectivos militares como parte del Plan Control Territorial para tareas de seguridad.

Reportaje de El Faro

Una parte esencial de este escenario en comprender el origen de la guerra contra las pandillas liderada por Nayib Bukele.

Para ello, en necesario ir al reportaje realizado por el medio El Faro de El Salvador.

El Faro vinculó la masacre de marzo a la ruptura de un supuesto pacto entre el Ejecutivo y las pandillas, donde fueros asesinadas un total de 87 personas.

Esos crímenes no tardaron en ser atribuidos por el Ejecutivo salvadoreño a esas agrupaciones criminales conocidas como “pandillas” o “maras”.

Esta ola de violencia en El Salvador llevó a finales de marzo a la aprobación por parte del Congreso de un régimen de excepción.

Fue allí donde El Faro demostró la ruptura de un supuesto pacto entre el gobierno salvadoreño y las pandillas, lo que provocó la masacre de finales de marzo.

Para elaborar esa investigación, el periodista Carlos Martínez dice haber estado en contacto con dos cabecillas de la Mara Salvatrucha-13 y una del Barrio 18, los grupos de mayor peso en El Salvador.

Detenidos, DDHH y Nayib Bukele

En medio de toda esta guerra, el presidente de El Salvador se negó a rendir cuentas con varios organismos internacionales de Derechos Humanos, como fue el caso con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Específicamente, Bukele rehusó entregar información respecto a las acusaciones de detenciones arbitrarias, muertes en custodia estatal y tortura bajo un régimen de excepción.

“La información oficiosa fluyó en El Salvador en los gobiernos anteriores”, recordó la periodista Paola Alemán.

“Ahora, si tú pides información oficiosa de cuánto están gastando los diputados, de cuánto está gastando Bukele en publicidad del Estado, esa información no está”, se lamentó.

“Esto hace mucho más fácil que las instituciones no estén entregando la información. Por ejemplo, Medicina Legal (Instituto de Medicina Legal) no te dice en realidad cuántos muertos hay por violencia y cuántos muertos hay por otros hechos que que no son violentos”, agregó.

Según diferentes ONGs, existe una falta de atención médica de los detenidos, especialmente de las personas con VIH, enfermedades crónicas y padecimientos psiquiátricos.

También señaló que han registrado casos de personas que han sido golpeadas por policías y soldados después de ser detenidas, incluyendo a menores de edad.

Nayib Bukele y el bitcoin en El Salvador

Una de las más polémicas aristas de Bekele a lo largo de todo su mandato, además de la guerra contra las pandillas, es la instauración -como método de pago oficial- de la criptomoneda bitcoin en El Salvador.

Desde que el Órgano Legislativo, a petición de Bukele, aprobó la Ley Bitcoin, el Gobierno supuestamente compró 2.381 bitcoins por más de 100 millones de dólares, cuyo valor se ha reducido por las caídas que ha tenido.

A pesar de que las transacciones de bitcoin podrían conocerse públicamente mediante la dirección de la billetera digital en la que se guardan, el Gobierno no ha revelado esta información.

El bitcoin, la criptomoneda más conocida y de mayor valor, cayó 5,35% después de que la plataforma de criptomonedas FTX haya pedido acogerse a la ley de bancarrota de Estados Unidos, debido a esta decisión.

A raíz de esta situación es que han surgido páginas web dedicadas a seguir de manera rigurosa cuánto dinero ha perdido Bukele con esta osada jugada.


A pesar de todo esto, “al salvadoreño le gusta que hablen de de su país y ellos mismos creen a través de la publicidad que la situación está controlada”, comenta Paola Alemán.

“Sin embargo, no saben que en realidad el efecto Bukele trae consecuencias para las personas que aunque no sean pandilleros pero están estigmatizadas en las zonas vulnerables donde viven”, finalizó.