La familia de “El Chapo”, que controla una facción del Cartel de Sinaloa, hizo un pacto electoral con MORENA a cambio de impunidad, un "narcopacto" que podría ponerse en práctica en las elecciones del próximo domingo.

Durante los comicios para ganar la gubernatura del estado de Sinaloa y algunas presidencias municipales, llevados a cabo en 2021, integrantes del partido oficial Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) hicieron un “narcopacto electoral” con Iván Archivaldo Guzmán Salazar, alias “El Chapito”, hijo del narcotraficante “El Chapo” Guzmán Loera.

Este, junto con sus hermanos “Los Chapitos”, comanda una de las facciones del Cartel de Sinaloa. A esto se suman sus tíos, Aureliano y Miguel Ángel Guzmán Loera, también involucrados en narcotráfico.

Así lo afirman fuentes directas que conocen de primera mano los hechos. Además, lo corroboran personas que han formado parte del equipo cercano del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quienes aseguran no desconoce ni desaprueba dicho acuerdo.

El propósito del acuerdo fue que los hijos y hermanos de “El Chapo” Guzmán se sumaran a la bendición dada por Ismael Zambada García, el líder máximo del CS, y ayudaran a que Rubén Rocha Moya, candidato de MORENA-Partido Sinaloense (PAS), ganara la gubernatura de Sinaloa.

Con el fin de que la familia de “El Chapo” operara en la elección, se realizaron reuniones claves con morenistas: al menos dos con Iván, considerado líder de “Los Chapitos”, llevadas a cabo en Culiacán.

Al menos una con “El Guano” y “El Mudo”, llevada a cabo en La Tuna, Badiraguato, en la casa de Consuelo Loera, la mamá de Joaquín Guzmán Loera, a quien AMLO saludó personalmente en Badiraguato, Sinaloa, en 2020.

Fuentes afirman que el narcopacto electoral se pondría en práctica de nuevo en las elecciones del domingo 5 de junio. Durante la instancia están en juego seis gubernaturas: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas.

Los acuerdos AMLO-narco podrían rastrearse desde el 2006

Desde 2019, en diversas entrevistas he venido narrando diversos eventos que revelan una convivencia y negociaciones entre el crimen organizado.

Lo anterior, particularmente con el Cartel de Sinaloa, e integrantes y líderes del partido oficial MORENA, así como de personas que se dicen emisarias de AMLO, como Ricardo Peralta.

Tengo más de 17 años investigando las redes de corrupción entre políticos, gobierno y partidos políticos con el crimen organizado. He podido documentar en los cuatro últimos gobiernos de México: Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto, y ahora, en el de AMLO.

México: el "narcopacto electoral" entre la familia de "El Chapo" Guzmán y el partido Morena
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Tras el anuncio abierto de la política pública de “Abrazos no balazos” del gobierno de AMLO, y de diversas acciones específicas me dí a la tarea de buscar las razones de esos eventos.

Ejemplos de esto son los diputados de MORENA vinculados al crimen organizado, como Sergio Mayer, así como la liberación de Ovidio Guzmán y el saludo del presidente a la mamá de “El Chapo” Guzmán como mensaje de legitimación.

De acuerdo a información que he obtenido en mis pesquisas, existe la sospecha de que el narcotráfico ha penetrado y operado en el movimiento que encabeza AMLO. Esto, desde su primera campaña presidencial, en el año 2006, cuando fue candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia.

Existen expedientes abiertos que así lo refieren.

Los presuntos viejos vínculos se habrían establecido con la entonces Federación, en la que aún estaban aglutinados: Cartel de Sinaloa, Cartel de Juárez y Cartel de los Beltrán Leyva, entre otros.

Familia de “El Chapo” Guzmán, coordinadores narcoelectorales

Una de las reuniones encabezadas por Iván Guzmán se llevó a cabo en Culiacán, en los primeros meses de 2021, con Ricardo Peralta.

El hombre fue subsecretario de Gobernación del Gobierno de AMLO hasta 2020, y quien se dice que sigue siendo operador del Gobierno federal de manera externa.

A esa reunión habría acudido Peralta a nombre del gobierno de AMLO para pedir apoyo y ofrecer garantías.

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Anuncios propagandísticos de campañas de candidatos de MORENA en Sinaloa llegaron a usar como fondo musical narcocorridos famosos en ese estado.

Por ejemplo, la música del corrido “Javier De los Llanos”, del grupo Calibre 50, fue música que acompaño la campaña de José Paz López Elenes, entonces candidato de MORENA-PAS a la presidencia de Badiraguato, y actual Alcalde.

En abril de 2021, el propio Rocha Moya grabó un video, el cual aún circula en Facebook, agradeciendo el apoyo de los músicos a su campaña.

Desde 2014, Iván Guzmán tiene una orden de aprehensión vigente por narcotráfico girada por una corte federal de California.

A fines del 2021, el Departamento de Justicia de EEUU lo puso en la lista de los “más buscados” y ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por su captura.

En los comicios de Sinaloa, de común acuerdo con Morena, “El Chapito” giró instrucciones y ordenó acciones narcoelectorales. Coordinó operativos violentos en Badiraguato contra la candidata del PRI a la presidencia municipal, Guadalupe Iribe.

Esto, con el fin de favorecer a José Paz López Elenes, candidato de MORENA- PAS, quien resultó vencedor.

El acuerdo de La Tuna

Como la facción de “El Chapo” en el CS quedó a su vez dividida entre sus hijos y sus hermanos, representantes de MORENA organizaron un encuentro separado con Aureliano y Miguel Angel Guzmán Loera, hermanos de “El Chapo” Guzmán mejor conocidos como “El Guano” y “el Mudo”.

Sonora es un Estado el en que también estaba en disputa la gubernatura en las elecciones de 2021, en las cuales ganó el candidato de MORENA, Alfonso Durazo.

“El Mudo” fue sentenciado por narcotráfico a 11 años de prisión en México, y luego de cumplir su condena fue puesto en libertad en 2017.

La reunión se llevó a cabo en La Tuna, Badiraguato, en la casa de Consuelo Loera, mamá de “El Chapo”. Estuvo presente directamente José Paz López Elenes, así como operadores electorales.

Miguel Ángel iba vestido con jeans, camisa fajada, y portaba elegantes zapatos de vestir y una llamativa pluma Mont Blanc.

Su hermano iba con traje de camuflaje. En torno había un cerco de hombres armados y López Elenes sostuvo conversaciones con ellos a puerta cerrada.

A la par de los encuentros con “El Mudo” y “El Guano”, la propiedad de la mamá de “El Chapo” Guzmán sirvió como escenario de un evento de campaña López Elenes.

Se afirma que, de los dos hermanos, el que a veces se sale del redil y quiere hacer acuerdos con otros actores políticos es “El Mudo”.

En las elecciones de Sinaloa “Los Américos”, como le decían a Américo Villarreal y su equipo, tenían trato preferencial sobre otras estructuras de Morena en el estado.

Presumían que daban apoyo económico a la campaña de Rocha Moya y que tenían instrucciones específicas del centro.

Al final Morena venció en la elección de gobernador y en la mayoría de los municipios.

Modelo “Sinaloa” en elección del próximo domingo

El ‘modelo exitoso’ que operó en Sinaloa en las pasadas elecciones -me aseguran fuentes de información directa- se habría puesto en operación en las elecciones que se llevarán a cabo el domingo 5 de junio.

Se afirma que al menos se aplicaría en tres de las seis gubernaturas en disputa: Durango, Tamaulipas y Quintana Roo.

En Durango, para el Cartel de Sinaloa es imprescindible mantener la hegemonía territorial, por ser parte clave del Triángulo Dorado, centro de producción, almacenamiento y tráfico de droga.

Quintana Roo es un punto clave de tráfico de droga proveniente de Sudamérica.

Por muchos años estuvo bajo el control del CS pero tras la incursión del Cartel del Golfo, Los Zetas, y, más recientemente, el Cartel Jalisco Nueva Generación, esa hegemonía se ha fraccionado. Recuperarla sería una ventaja en los negocios internacionales del tráfico de drogas.

Por otra parte, Tamaulipas ha sido un bastión que el Cartel de Sinaloa nunca ha tenido.

Ha luchado por desplazar allí al Cartel del Golfo, y luego su brazo armado, Los Zetas, desde hace 20 años en una guerra sangrienta.

Pero, pese a la ayuda militar y policiaca de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, no lo ha logrado, porque gobiernos locales han apoyado históricamente al CG.

Si el CS tuviera hegemonía en Tamaulipas, por primera vez en su historia criminal podría controlar los cuatro estados fronterizos más importantes para el tráfico de droga a Estados Unidos. Baja California, Sonora y Chihuahua, en los cuales tiene hegemonía.

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Los intereses relacionado a El Chapo Guzmán

AMLO, ingeniosamente, a diferencia de sus antecesores, ha disfrazado los pactos con el narcotráfico bajo el manto propagandístico del “buen samaritano”.

Mientras Felipe Calderón hablaba de “guerra contra el narcotráfico” y protegía al Cartel de Sinaloa y asociados, AMLO enarbola la no acción -llámese protección- al CS.

Lo anterior, bajo la justificación del ‘buen pastor’, que cuida incluso de las ovejas negras, para así manipular los cientos de años de dogma católico impuesto en México.

Pero, al contrario del “buen samaritano”, que actúa sin esperar nada, AMLO y Morena sí exigen algo a cambio de no combatir a las organizaciones criminales.

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Ejemplo de esto es el Cartel de Sinaloa y otras organizaciones dedicadas a extorsión y huachicoleo. Exigen a cambio ayuda financiera y operativa para ampliar su hegemonía política en el país. Al menos así lo muestra el modelo que operó en Sinaloa.

Mientras de manera cíclica se sigan llevando a cabo los pactos entre los partidos y gobernantes en el poder con el crimen organizado. Decenas de miles de personas seguirán desapareciendo en México, decenas de miles seguirán siendo ejecutados, extorsionados, secuestrados, explotados y traficados.

No se puede llamar partido político ni gobierno, ni antes ni ahora, a quien para obtener el poder hace acuerdos con el crimen organizado entregando a los ciudadanos como reses al matadero.