El 66% de peruanos afirmó en una encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) que el izquierdista Pedro Castillo ganó la segunda vuelta presidencial en Perú y el 53% sostiene que la denuncia de fraude de Keiko Fujimori es una estrategia para no reconocer su derrota.
Solo un 25% de encuestados dijo que la candidata derechista Keiko Fujimori habría ganado el balotaje, mientras que un 9% se declaró indeciso, de acuerdo al sondeo publicado por el diario La República.
Según el cómputo final de la votación del pasado 6 de junio, Castillo obtuvo el 50,12% de los votos, mientras que la hija del expresidente Alberto Fujimori se quedó con el 49,87%, una diferencia de poco más de 44.000 votos a favor del maestro rural.
Sobre las denuncias de “fraude sistemático” defendidas por Fujimori y sus partidarios, un 53% de los encuestados respondió que no tienen razón porque “es una estrategia para no reconocer los resultados”, frente a un 31% que las respaldó y agregó que han habido “irregularidades en las mesas de votación”.
Otro 12% cree que tienen algo de razón, pero que no afectará el resultado, mientras que un 4% no sabe o no opina.
Sin pruebas ni proclamación
Hasta el momento no existe ninguna prueba fehaciente de la existencia de este “fraude”, y tanto observadores internacionales, organismos electorales y analistas de datos coinciden en señalar en que no hubo irregularidades relevantes, y en ningún caso nada más allá de lo habitual en cualquier otro proceso electoral.
No obstante, aún no se ha realizado la proclamación del ganador porque los jurados electorales están resolviendo los pedidos de nulidad y apelaciones presentadas por el partido de Fujimori, principalmente.
La encuesta del IEP reveló, en su lugar, que el 69% desaprueba la actitud de Fujimori después de la segunda vuelta, mientras que el 29% la respalda y un 2% se mantiene indiferente.
Los sectores que sostienen el mayor rechazo a la actitud de la excongresista son el sur y oriente del país, así como las zonas rurales y los electores más jóvenes, entre 18 y 24 años.
No obstante, la actitud de Castillo, que en la práctica se proclamó extraoficialmente como mandatario electo, también ha sido rechazada por el 49% de encuestados y recibió el apoyo del 47%.
Expectativa por cambios con Castillo
Entre los votantes de Castillo, un 51% responde que lo hizo porque ofrecía el cambio que el país necesita y 25% porque no quiere que el fujimorismo vuelva al poder.
Asimismo, un 14% sostiene que se preocupará por los que menos tienen y un 10% porque confía en él.
A su vez, un 55 % de los votantes de Fujimori lo hicieron porque no quieren que la izquierda o el comunismo lleguen al poder, un 20% porque asegura estabilidad y orden, y un 14 % porque ofrecía el cambio que el país necesita.
Enfrentamiento de anti-votos
La jefa de Estudios de Opinión de IEP, Patricia Zárate, comentó que el alto porcentaje de desaprobación a Fujimori responde a que el 53 % de encuestados sostiene que no tiene razón en sus reclamos y que son una estrategia para no reconocer los resultados.
Además, Zárate añadió que el “antivoto” es mucho más fuerte en el caso de Castillo que en el de Fujimori, y por ese motivo “es difícil construir en negación”.
“Por ello la aceptación de resultados que nos muestra la mayoría de encuestados parece ser la vía para seguir enfrentando la pandemia y el bicentenario” de la independencia en el país, indicó Zárate.
La encuesta de IEP se realizó entre los días 17 y 20 de junio a una muestra de 1.210 entrevistados telefónicamente, a nivel nacional, con un nivel de confianza de 95% y un margen de error de 2,8%.