La opinión pública argentina no sale del asombro.
El caso ocurrió en Santiago del Estero y reviste tintes de abusos en una niña de tan solo 12 años: uno de violación y el otro, de agresión física.
El primero, fue cometido por un hombre de 25 años. El sujeto estaba teniendo relaciones sexuales con la menor, en una casa de habitación en la localidad Los Juries, según la publicación del medio local El Liberal, la cual ha sido retomada por otros como TN.
El hecho constituye, por la edad de la niña, un abuso sexual en toda la extensión de la palabra, pero la novia del sujeto se abalanzó contra ella luego de descubrir los hechos.
Cecilia Rímini es la fiscal encargada de ventilar las causas en contra de la víctima, la de tipo sexual y la agresión física.
La golpiza fue tal que, al enterarse de los acontencimientos, la madre de la menor la trasladó a un hospital de la localidad antes mencionada. Ahí constataron las lesiones que sufrió.
El hombre que abusaba de la niña quedó detenido. Su novia, quien en un arranque de furia no priorizó entre víctima y victimario, también está bajo disposición de las autoridades.
La madre de la menor interpuso una denuncia en contra de la agresora física pero, consta en los medios locales, que no ha presentado una causa contra el agresor sexual de su hija. No obstante, la fiscalía local está actuando de oficio en el tema.
El código penal local sostiene que el sexo con menores de 13 años reviste la figura “abuso sexual” y por eso, la persona que comete el delito va indiscutiblemente a prisión.
Desde los 13 años, para la situación antes mencionada, el delito se convierte en “estupro” bajo las leyes argentinas.
Los fiscales de Santiago del Estero han dejado claro que priorizarán la causa del abuso sexual contra la menor, pese a que su madre se mostró furiosa por la golpiza, más que por el delito cometido por el hombre arrestado.
En las próximas horas, la víctima será sometida a peritajes más detallados, entre estos la cámara Gesell.
Al parecer, el trasfondo es más complicado de lo que se sabe. La menor, pese a tener solo 12 años, no contaría con una figura responsable a su cuidado. Entre otros aspectos, las autoridades investigan el hecho de que no llega a dormir algunas noches a su hogar.