El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reclamó este lunes que la corona de España y la Iglesia católica pidan perdón por los “agravios” cometidos durante la conquista de América, algo que el gobierno español rechazó “con firmeza”.
“Envié ya una carta al rey de España y otra carta al papa (Francisco) para que se haga un relato de agravios y se pida perdón a los pueblos originarios por las violaciones a lo que ahora se conoce como derechos humanos”, anunció López Obrador en un video en sus cuentas de Facebook y Twitter.
El mandatario izquierdista lanzó este llamado al cumplirse 500 años de la batalla de Centla, considerada el primer enfrentamiento del conquistador español Hernán Cortés contra pueblos originarios de México. En este caso, los mayas-chontales del estado de Tabasco, de donde es oriundo López Obrador.
Pero el gobierno español lamentó en un comunicado que se haya dado a conocer la misiva al monarca, cuyo contenido rechazó “con toda firmeza”. Subrayó que las circunstancias de aquella época eran distintas y resaltó “el enorme caudal de afecto” entre México y España.
“La llegada, hace quinientos años, de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas”, dijo.
No obstante, para el presidente mexicano de 65 años, que asumió el 1 de diciembre, tras la llegada de los españoles al nuevo continente “hubo matanzas, imposiciones”.
“Se asesinaron miles de personas durante todo este periodo, se impuso una cultura, una civilización sobre otra (…) el saqueo colonial de nuestros recursos naturales”, dijo más adelante López Obrador, en un evento público en Centla.
Recordó que el papa Francisco ya ofreció una disculpa similar en Bolivia. “Queremos que lo haga también en México”, subrayó.
En este segundo discurso, el presidente no se refirió a la negativa de España.
Esta es la primera vez en la historia reciente de México que un presidente se refiere a la conquista en tales términos.
Reconciliación histórica
López Obrador dijo sin embargo que espera que en 2021 se logre una “reconciliación histórica” entre España y México, año en que se cumplirán 200 años de la consumación de la independencia mexicana (en 1821) y 500 años de la caída de la Gran Tenochtitlán, hoy Ciudad de México y antaño sede del imperio azteca.
“No es el propósito resucitar estos diferendos sino ponerlos al descubierto, no mantenerlos en el subsuelo (…) Todavía, aunque se niegue, hay heridas abiertas y es mejor reconocer que hubieron abusos y que se cometieron errores, es mejor pedir perdón y a partir de eso buscar hermanarnos en la reconciliación histórica”, añadió en Centla.
Aseguró que él también pedirá perdón, pues en el México independiente se cometió un “exterminio” contra pueblos originarios, como los yaquis en el norte del país o los mayas en el sur, además de que durante la revolución mexicana hubo persecución a migrantes chinos.
La conquista española en el antiguo México fue de 1519 a 1521, cuando cayó la Gran Tenochtitlán y se dio inicio a la colonización.
A finales de enero pasado, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, realizó una visita oficial a México en la que ambos países refrendaron sus lazos de amistad y de cooperación.
Fiel a su costumbre de hacer un obsequio a sus anfitriones, Sánchez le trajo al presidente mexicano el acta de nacimiento de su abuelo, José Obrador, quien nació en la localidad española de Cantabria, en 1893.
Según un estudio de un organismo científico gubernamental, el 98% de la población mexicana desciende de una mezcla de poblaciones originarias, europeas -sobre todo españolas- y africanas.
La semana pasada, la actriz y senadora por el partido oficialista Morena, Jesusa Rodríguez, causó revuelo tras publicar un video en Twitter en el que asegura que el primer taco de carne de cerdo -animal llevado por los españoles a América- que se comió en México fue en el marco de un festejo de Cortés tras la derrota de los aztecas.
“Recuerda que cada vez que comes un taco de ‘carnitas’, estás festejando la caída de la Gran Tenochtitlán”, sentenció Rodríguez al referirse a una de las variedades de tacos más degustadas por los mexicanos y visitantes extranjeros, y uno de los muchos platillos que simbolizan el mestizaje mexicano.
La cultura mexicana, sobre todo su gastronomía, está plagada de platillos que sintetizan el mestizaje, como el famoso mole -que lleva más de una veintena de ingredientes indígenas y europeos-, mientras que el Día de Muertos conjuga la tradición católica con el culto prehispánico a los muertos.