El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, urgió el viernes al gobierno venezolano de Nicolás Maduro a “no usar la fuerza letal contra manifestantes”, tras reunirse con el canciller Jorge Arreaza.
El líder de la Asamblea Nacional venezolana Juan Guaidó, reconocido por Estados Unidos y medio centenar de países como presidente interino de Venezuela, asegura que la ayuda humanitaria extranjera entrará este sábado en Venezuela, cueste lo que cueste.
El presidente Maduro rechaza la ayuda y asegura que es el inicio de una acción militar para derrocarle, liderada por Estados Unidos.
“El secretario general urgió a las autoridades venezolanas a no usar fuerza letal contra los manifestantes”, indicó su despacho en un comunicado.
Guterres dijo que la ONU “seguirá actuando de acuerdo a los principios humanitarios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia, trabajando con las instituciones venezolanas para asistir a las personas que lo necesitan”.
Guterres se reunió el jueves en la ONU con el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo y también le llamó a “evitar la violencia” en Venezuela, indicó su portavoz, Stephane Dujarric.
El jefe de la ONU rechaza toda “politización” de la ayuda humanitaria.
“La ayuda humanitaria debe ser utilizada de manera imparcial (…) y sin objetivo militar”, insistió su portavoz este viernes, al deplorar la muerte de dos personas en enfrentamientos con el ejército venezolano en la frontera con Brasil.
Dos indígenas murieron y 15 quedaron heridos en un enfrentamiento con militares venezolanos en la zona fronteriza con Brasil, cuando trataban de impedir que los soldados bloquearan una carretera para el ingreso de ayuda humanitaria, informó Kapé Kapé, una organización de derechos humanos.
Guterres accedió a los pedidos de reuniones de Pompeo y Arreaza pero resiste a las presiones para tomar partido. Se ha limitado a ofrecer sus buenos oficios para alcanzar una solución negociada a la crisis en Venezuela.