Corría mayo, mes de las celebraciones para la madre en buena parte del continente americano. Frente a la escuela de Suzano, municipio del estado brasileño de Sao Paulo, un grupo de mujeres con sus hijos, esperaban a que las puertas de una escuela se abrieran el pasado sábado 12 de mayo, para participar de los festejos.
Faltaban unos minutos, pero un hombre de 21 años, identificado como Elivelton Neves Moreira, aprovechó la distracción para empuñar su arma contra los presentes, no importando las edades. Entonces, apareció la policía militar Katia Sastre. Rápidamente, la mujer asestó varios impactos de bala en el pecho de Moreira, repeliendo el asalto en progreso.
Los presentes, entre estos su hija, corrían en medio de la balacera y un auto hasta estuvo a punto de golpearla ante el nerviosismo de su conductora por huir de la escena.
El suceso le dió la vuelta al mundo, consiguiendo que los medios de comunicación titularan la acción, destacando el heroísmo de una joven madre, quien estaba en el lugar como parte de las agasajadas.
Vinieron entonces los elogios en redes sociales, los reconocimientos tanto de la policía militar de Sao Pablo, en fin, la fama de Sastre se catapultó de la noche a la mañana, por lo que llovieron las ofertas del mundo de la política en un año electoral.
De policía, a candidata del Partido de la República
El PR (Partido de la República), ofreció a Katya Sastre, correr por una diputación federal dado el caudal social de la mujer de 42 años, vista como una heroína, en un estado y en un país donde la delincuencia tiene hartos a sus habitantes.
Katia aceptó, pero sabía que la razón por la que estaba en el ruedo político, era el viral video que la mostró repeliendo el asalto y matando al joven ladrón que falleció en un hospital de Suzano.
Inició entonces una campaña con el uso de las imágenes tomadas por la cámara de seguridad del colegio de su hija, que para ese entonces ya estaba más que reproducido en la web.
Sastre y su equipo de campaña post produjeron las imágenes, insertando su voz y otra masculina, dramatizando los hechos, incluídos gritos de los presentes.
El mensaje al final de la producción es claro y ambicioso, como suele suceder en tiempos de campaña: “Disparé y dispararía de nuevo. Mi hija y otros niños estaban en la mira del bandido. Reaccioné como policía y como madre. Voy a tener siempre la misma actitud en el combate al crimen. Coraje tengo”.
Pocos días antes de la elecciones en territorio brasileño, el máximo tribunal electoral le ordenó a la entonces candidata, retirar el spot de campaña y así lo hizo, pero fue multada con 1.200 dólares (5.000 reales) porque el video “promueve en todos los espectadores la incitación al atentado contra las personas”, según autoridades electorales. Sin embargo, los resultados que obtendría ya estaban gestados, de acuerdo a la simpatía que ganó previamente del electorado.
De las más votadas
Lo ocurrido tras las pasadas elecciones generales en Brasil, aún está siendo digerido por América Latina y el mundo, dada la principal noticia: los resultados del candidato de extrema derecha, Jair Bolsonaro, un temido ultraconservador, que aunque no pudo agenciarse el triunfo en primera vuelta, tiene posibilidades de convertirse en el próximo presidente de los cariocas, pese a sus extremistas ideas.
Pero en medio de la polémica, el caso de Sastre, ganó notoriedad debido a sus resultados. La policía militar resultó electa como candidata federal, con 264 mil votos, según lo publicado por el periódico local Extra Globo.
La publicación, denota además, que la legisladora electa es la séptima más votada del estado de Sao Paulo, lo que indica que su campaña contra la inseguridad, derivada de su hazaña a la hora de repeler el asalto, surtió el efecto esperado por ella y su equipo en el electorado.