Este lunes, Evo Morales llamó al presidente Sebastián Piñera a “encontrar formas de entendimiento” a pocos días que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya falle sobre su pedido de negociar una salida al Océano Pacífico.
“Al hermano presidente de Chile, Sebastián Piñera, lo invito a que juntos encontremos formas de entendimiento para cerrar heridas abiertas hace más de 100 años, cumpliendo el derecho internacional y honrando los valores de justicia, dignidad y buena fe que deben reinar entre nuestras naciones”, dijo Morales en una conferencia de prensa.
Además, a través de su cuenta oficial de Twitter, el gobernante convocó a su pueblo a esperar el fallo, fijado para el 1 de octubre, “con la serenidad y tranquilidad que nos da la certeza de que la historia, el derecho, la justicia, la verdad y la razón están con la causa boliviana”.
En una declaración de 10 minutos desde la casa de gobierno, Morales invocó “respetuosamente al pueblo y al gobierno de Chile a compartir con esta serenidad estos días previos al fallo de la Corte”.
En 2013, el gobierno de Morales llevó a Chile ante la CIJ para reclamar que su vecino cumpla con sus históricas ofertas de negociar una salida al mar, perdida a fines del siglo XIX en la Guerra del Pacífico.
Morales evocó las resoluciones de la CIJ y concluyó que hasta ahora “Bolivia ya ha obtenido grandes logros en nuestra causa marítima a nivel internacional”.
En esa línea, Morales recordó que, en septiembre de 2015, la Corte “reconoció que Bolivia nació con mar, que fue objeto de una invasión y de una guerra de conquista territorial (en 1879), que lo despojó” de su única costa.
Además, dijo que la CIJ falló que “el Tratado de 1904 no ha resuelto la cuestión pendiente de nuestro derecho a obtener un acceso libre y soberano (…) mediante el diálogo y la negociación de buena fe”.
Por esas circunstancias, Morales estimó que “nuestro reencuentro con el mar no sólo es posible, sino inevitable”.
En la denominada Guerra del Pacífico, Bolivia perdió frente a Chile 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.
Ambas naciones carecen de relaciones diplomáticas desde 1978, cuando fracasó una negociación sobre el mismo tema.