El presidente boliviano Evo Morales anunció este viernes que Bolivia presentó una contrademanda a Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con sede La Haya, por el uso de las aguas del Silala, entregando además la contramemoria en el litigio que inició Chile en 2016 por el mismo tema.
En la contrademanda boliviana “le pedimos a la Corte Internacional de Justicia que juzgue y declare que Bolivia tiene soberanía sobre los canales artificiales, y los mecanismos de drenaje en el Silala, que están ubicados en su territorio, y tiene el derecho soberano a decidir cómo los mantendrá”, agregó el mandatario.
“Bolivia tiene soberanía sobre el flujo artificial de las aguas del Silala, que ha sido diseñado, mejorado o producido en su territorio y Chile no tiene derecho a ese flujo artificial”, apuntó.
Además de antecedentes científicos, #Bolivia ha presentado en su Contramemoria, argumentos de orden histórico y jurídico que llevan a solicitar a la Corte Internacional de Justicia, desestime y rechace la demanda de #Chile.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 31, 2018
“Bolivia tiene soberanía sobre el flujo artificial de las aguas del Silala en su territorio y Chile no tiene derecho a ese flujo. Cualquier entrega de Bolivia a Chile de las aguas del Silala que fluyen artificialmente se sujeta a celebración de un acuerdo específico”, sostuvo el mandatario altiplánico.
El anuncio de Morales resultó sorpresivo para ambos países, pues el mismo mandatario afirmó hace dos meses que habían descartado la posibilidad de presentar una contra demanda.
“Inicialmente se ha pensado en la contrademanda, pero por recomendaciones jurídicas de carácter internacional se ha descartado”, indicó el mandatario boliviano en junio del presente año.
El agente boliviano ante La Haya, Eduardo Rodríguez Veltzé, “presentó ante la secretaría de ese Tribunal la contramemoria de Bolivia, dentro del juicio iniciado por la República de Chile sobre la naturaleza y el uso de las aguas de los manantiales del Silala”, dijo Morales en una declaración de prensa.
La postura chilena sostiene que las agua del Silala fluyen a su territorio desde hace más de un siglo, provienen de un río internacional compartido, mientras que Bolivia señala que son producto de manantiales canalizados artificialmente hacia territorio chileno.
Chile presentó en 2016 una demanda ante la CIJ con el argumento de que el Silala es un río internacional con derechos de agua compartidos, mientras Bolivia sostiene que se trata de un manantial que nace en bofedales y agua subterránea en su territorio, canalizado artificialmente hacia el vecino país.
Ambos países, con relaciones consulares desde 1978, sostienen otro litigio en la misma CIJ, luego que La Paz presentara en 2013 una demanda para que su vecino cumpla su histórica oferta de resolver una salida al océano Pacífico para Bolivia, que perdió ese acceso tras la Guerra del Pacífico.