Fuerzas especiales de seguridad mexicana rescataron a dos españoles que habían sido secuestrados en el estado de Puebla y por los que pedían de rescate más de 1,5 millones de dólares, informó este jueves la fiscalía regional.
El secuestro ocurrió la madrugada del lunes cuando los españoles y un amigo mexicano salieron de su casa, localizada en una exclusiva zona residencial en Puebla (a unos 120 kilómetros de Ciudad de México), para dirigirse a una empresa española en la que trabajan.
Apenas unos metros adelante fueron interceptados por hombres armados en un par de vehículos, dijo a la prensa Fernando Rosales, director del combate al secuestro en la fiscalía de Puebla.
Los dos españoles de 31 y 41 años fueron capturados, mientras que el mexicano logró escapar y dio aviso inmediato a las autoridades locales. Entonces, se estableció contacto con la unidad antisecuestro de la Policía Nacional de España.
Horas después del secuestro, el dueño de la empresa recibió una llamada de los captores en su domicilio localizado en España.
Un “sujeto exigió 30 millones de pesos (poco más de 1,5 millones de dólares, más de 900 millones de pesos chilenos) para liberarlos dando un plazo de dos días para entregar el monto o mataría a uno de ellos”, explicó Rosales.
Dos hombres han sido detenidos como probables autores del secuestro, ambos mexicanos. Uno de ellos fue jefe de seguridad de la firma española pero fue despedido.
El operativo de rescate fue realizado la noche del miércoles por agentes estatales y de la fiscalía general mexicana en una vivienda ubicada en una zona rural de Puebla y sin necesidad de realizar disparos, según la fiscalía.
Las víctimas “estaban en una cámara de refrigeración sin luz” pero “están en buen estado”, dijo Rosales.
“Ha sido un trabajo excepcionalmente bien llevado, los ciudadanos están bien”, dijo de su lado Bonifacio Diez Sevillano, agregado de Interior de la embajada de España en México.
A la par de la ola de violencia ligada al tráfico de drogas que golpea a México desde hace una década, los secuestros extorsivos se han multiplicado en distintos puntos del país.