El gobierno de Bolivia presentó un reclamo oficial contra Chile por una “grave afectación al comercio exterior” de ese país, debido a los paros de empleados públicos.
“La Agrupaciónn Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) efectivizó un nuevo paro de 72 horas los días 26, 27 y 28 de octubre, lo que vulnera nuevamente el derecho de Bolivia al más amplio y libre tránsito, por territorio chileno, para toda clase de carga, en todo tiempo y sin excepción alguna, tal como lo establece el Tratado de 1904, la Convención de Tránsito de 1937 y otros instrumentos posteriores”, esgrime un comunicado del país vecino.
El documento difundido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia señala que el país altiplánico se ve afectado por “la falta de capacidad del gobierno chileno de garantizar el cumplimiento de sus compromisos internacionales con el Estado Plurinacional de Bolivia y de atender las demandas de sus trabajadores“.
“Los constantes paros y huelgas, registrados en los últimos años (…) resultantes de la privatización de los puertos, se constituyen en una evidente vulneración al derecho de Bolivia de contar con el más amplio y Libre Tránsito por el territorio y los puertos del Pacífico”, indica el comunicado.
Según la cancillería boliviana, las paralizaciones de actividades “estrangulan” su comercio exterior y limitan sus posibilidades de desarrollo.
Finalmente, Bolivia pide “un resarcimiento” de las millonarias pérdidas económicas producto de la incapacidad del Gobierno de Chile de asumir la responsabilidad por los “incumplimientos a sus compromisos internacionales”.
Listado de pérdidas que acusa Bolivia:
– Multas de las empresas navieras por retraso en la devolución de contenedores vacíos.
– Multas y recargos por el incumplimiento de contratos de exportación al no poder embarcar la carga en puerto.
– Costos relacionados con la suspensión de actividades industriales a la espera de insumos detenidos en territorio chileno.
– Costo de garaje por las unidades de transporte que se encuentran en territorio chileno, que no pueden retornar a Bolivia.
– Viáticos de transportistas que esperan poder retornar a Bolivia.
– Pérdidas por la imposibilidad de firmar nuevos contratos de transporte, al encontrarse las unidades imposibilitadas de transitar a Chile.
– Costos por concepto de reparación de daños mecánicos producidos a los radiadores y otras partes del motor de camiones parados a temperaturas bajo cero en frontera. Pérdida de productos perecederos como alimentos y otros.
– Multas por incumplimiento en la ejecución de obras de infraestructura y proyectos productivos al no contar con los bienes de capital e insumos que se encuentran detenidos en territorio chileno.