La discusión incluyó insultos, intentos de agresión física y amenazas de muertes, razón por la cual el referí argentino decidió denunciar al capitán de Lanús.
El encuentro entre Lanús y Racing, por la fecha 23 de la Liga Profesional de Argentina, dejó situaciones de todo tipo.
Una de las más comentadas fue la protagonizada por Darío Herrera, árbitro del encuentro, y Lautaro Acosta, capitán de Lanús, quienes se enredaron en una discusión que incluyó amenazas de muerte y que hoy estaría en manos de la justicia.
Según consta en el acta que el referí redactó tras el partido, luego del pitazo final el jugador del elenco granate habría ido hasta su camarín para insultarlo, amenzarlo de muerte a viva voz y tratar de agredirlo.
Si bien la situación no pasó a mayores, en gran medida por la rápida acción de los guardias de seguridad que se encontraban en el recinto, todo lo ocurrido quedó de manifiesto en la declaración que el juez redactó y que se dio a conocer durante esta jornada.
“Te voy a cagar a trompadas, sos un soberbio de mierda. Sos un corrupto, estás en la joda. Si nos dirigís una vez más, te voy a matar”, dejó estipulado en su declaración.
Pero, ¿qué fue lo que pasó qué originó tal discusión? Aparentemente, la ira desenfrenada de Acosta habría sido consecuencia de la tarjeta amarilla que el referí argentino le mostró, en los minutos finales del primero tiempo, luego de que éste se molestara por una falta cobrada a favor de Racing.
Tras el cotejo que finalizó 3-1 en favor de ‘La Academia’, el director Nacional de Arbitraje en Argentina, Federico Beligoy, conversó con TNT Sports Argentina para entregar más detalles de lo ocurrido y de las acciones legales que se están tomando al respecto.
“Son situaciones que exceden lo normal, no sucede ni a menudo ni durante un tiempo extenso. Son situaciones totalmente increíbles. Una vez que sucedió, Darío se comunicó conmigo para ponerme al tanto y para avisarme lo que iba a hacer. La gente de seguridad que estaba ahí observaron lo que sucedió y lo invitaron a que haga la denuncia”, indicó Beligoy.
“No sucede habitualmente algo así. A mí nunca me pasó que un jugador entre a un vestuario e intente agredirte, y quiera matarte a trompadas como dice la denuncia. No es algo que puede suceder. Sí discutimos, tenemos encontronazos, charlas futboleras y hasta discusiones en un tono alto por una situación de juego. Pero esto fue increíble. Acompaño y ayudo a Darío Herrera para que esto tenga una sanción ejemplificadora. No podemos permitir que se quiera agredir a un árbitro o intentar hacer lo que hizo Acosta. Es inconcebible”, concluyó.