La modelo brasileña que acusó a Neymar de violación y agresión, Najila Trindade Mendes de Souza, aseguró en una nueva entrevista estar viviendo un verdadero calvario.
“No como y perdí 10 kilos la semana pasada”, dijo. Además, señaló que “creí en la ley, pensé que mi nombre iba a quedar en sigilo, en secreto”, en relación a que su identidad se reveló inmediatamente tras la denuncia.
“Confié, jamás imaginé que yo estaría en Internet y expuesta a todo el mundo porque eso es un crimen. Todo está distorsionado, todo está mal. Mi vida cambió de inmediato. Intento gritar, pero nadie me escucha”, confesó.
Debido a su repentina aparición mediática por la denuncia, la joven de 26 años reveló que está tomando “muchos remedios en los últimos días, no me alimento. Creo que ahora necesito un poco de tranquilidad. Estoy muy alterada. Necesito recuperarme y no estoy bien”.
“Estoy con síndrome de pánico. No como y perdí 10 kilos la semana pasada”, lamentó. “La gente quiere sacar provecho de mi dolor, me siguen, siguen a mi familia. No sé qué es peor, si estar dormida o despierta”, añadió.
“Cada vez más cosas se salen de control y las personas no tienen respeto por mi dolor, el dolor de mi hijo. No consigo tener mi vida, trabajar, estudiar, quedarme con mi hijo. No tengo psicología para quedarme hablando de este asunto, para salir a la calle y que la gente me persiga”, expresó.
Tras ser consultada sobre quién estaría diciendo la verdad, si ella o Neymar, la modelo eludió el tema y habló sobre los problemas de su hijo, recogió Infobae.
“No ha ido a la escuela, escucha el nombre de su madre y llora”, cerró