A casi dos meses del comienzo de la segunda temporada de Gran Hermano, “Big” anunció a sus participantes que desde esta semana regresará la recordada prueba del supermercado.
Fue el líder de la semana, Pedro Astorga, el encargado de leer el comunicado de la voz omnisciente, quien detalló que la actividad sufrirá drásticos cambios en comparación con la primera edición.
Según relató el kayakista, será solo uno de los participantes el encargado de hacer la compra, la cual se realizará en un tótem y no en el zum recreando el supermercado.
Sumado a ello, quien haga la compra dispondrá de 15 minutos para seleccionar los productos acordados con sus compañeros, además de un presupuesto de poco más de un millón de pesos.
La noticia sorprendió a los participantes, quienes teorizaron con los valores que tendrán los productos: “$500.000 una Nutella”, dijo a modo de broma Michelle Carvalho.
Quienes no tardaron en criticar las modificaciones fueron los televidentes del programa, quienes lo compararon con la primera edición, donde el presupuesto tenía un máximo de 300 mil pesos y los jugadores debían realizar pruebas grupales para ganarlo.
Algunas de las más recordadas fueron la de sacar un tubo de plástico de unos grandes bloques de hielo usando sus manos, el carrusel donde debían girar sin parar por algunos minutos, presionar el botón de diferentes totems dispuestos en la casa al azar, asi como la ocasión en que todos los participantes debieron mantenerse dentro de una cama por pieza durante varias horas.
Sumado a ello, “Big” solía sancionarlos con parte del presupuesto semanal si no se seguían las reglas del encierro.