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Kathy Orellana, exparticipante de "Rojo", ha enfrentado dificultades como madre debido a sus pasadas adicciones, por las cuales terminó perdiendo la custodia de su hijo Facundo. Sin embargo, tras un intenso proceso de rehabilitación, la cantante ha dejado su pasado atrás y ha compartido en redes sociales nuevos y emotivos momentos junto a su pequeño, además de revelar en una reciente entrevista que está en el proceso de recuperar su tuición.

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Desde hace tiempo, Kathy Orellana ha enfrentando diversas dificultades ligadas a su rol como madre. Hay que recordar que la exparticipante de “Rojoperdió la custodia de su hijo, Facundo.

Sin embargo, recientemente, la cantante ha mostrado en sus redes sociales cómo ha dejado su pasado atrás (marcado por sus adicciones) gracias a un intenso proceso de rehabilitación.

En abril del presente año, Orellana compartió una serie de postales junto al pequeño, luego de haber asistido al matrimonio de unos amigos con él, destacando que en aquel entonces, podía vivir tal evento con su pequeño “en total lucidez”.

Kathy Orellana busca recuperar la custodia de su hijo

En una actual entrevista con Página 7, Kathy confesó que se encuentra hoy en día viviendo con su hijo, “pero aún estoy con un proceso en tribunales para recuperar su custodia”.

“Estamos bien. Cada vez queda menos, vivimos los dos solitos, pero en un proceso de estudio para ver si soy competente como mamá“, contó al medio citado.

“Gracias a Dios ha fluido a favor de la relación que tengo hoy con mi hijo”, agregó en el diálogo, dejando en evidencia que las cosas sólo han ido mejorando en su vida.

En la entrevista, Katherine declaró también estar viviendo junto a su madre, quien sufrió un ACV el año pasado: “Como ha llovido tanto en Rancagua estos días, le dije ‘véngase para acá’ (…) me costó convencerla para que se viniera hasta que pare la lluvia”.

Va progresando. Después del ACV quedó postrada, luego usó silla de ruedas, después kinesiólogo y ahora anda con burrito. Pronto usará bastones”, agregó en la conversación, detallando además que, por fortuna, la adulta mayor ya se moviliza mejor para hacer cosas de su rutina diaria.