La noche de este domingo se vivió el primer episodio de eliminación de Gran Hermano. En el capítulo se reveló un momento que los televidentes ya habían podido atestiguar a través de la transmisión en vivo y que provocó el primer llamado de atención del personaje omnipresente para dar consentimiento para relaciones sexuales.
Fue durante la noche posterior a la fiesta del viernes que el influencer Lucas Crespo y la empresaria Francisca Maira compartieron cama. Durante este acercamiento los participantes se besaron bajo las sábanas, lo que provocó un público e incómodo llamado de atención de parte del Gran Hermano.
“Lucas, Fran, recuerden dar el consentimiento a cámara, por favor”, se pudo escuchar en la robótica voz por los parlantes, lo que resonó en toda la casa y desató las risas de todos sus compañeros interrumpiendo el momento.
Las carcajadas no se dejaron esperar y las de los involucrados tampoco, quienes solo pudieron cubrirse la cara en signo de vergüenza.
“No vale. Un consentimiento que no ha pasado nada”, aclaró la también modelo de Only Fans a sus compañeros, quienes seguían riéndose de la situación provocada por el Gran Hermano.
Tras el extenso momento, en el estudio la animadora Diana Bolocco categorizó el momento como “mata pasiones”: “Con todo el respeto que se merece el Gran Hermano, es nuestro jefe y tiene que hacerlo, pero un poco mata pasiones ¿o no?”, dijo antes de desatar las risas en el set.
Cabe recordar que el personaje del reality comenzó a solicitar el consentimiento para tener relaciones sexuales luego de que en la versión del 2017 del programa en España un participante abusara sexualmente de otra mientras esta estaba bajo los efectos del alcohol. Desde ese momento, en el encierro también se controla el consumo de licor.