A los 14 años, Máximo Menem Bolocco recibió un diagnóstico que lo dejó a él y a su madre, Cecilia Bolocco, con el alma en un hilo: el joven sufría de un complicado tumor cerebral.
Con el fin de buscar un tratamiento óptimo, él y su madre se mudaron a Estados Unidos para probar un nuevo método médico para combatir el cáncer: el tratamiento con protones. Así, gracias a la novedosa tecnología, el joven pudo enfrentar la enfermedad.
Según explica la Clínica Mayo en su sitio web, este tratamento, también llamado protonterapia, “es un tipo de radioterapia”, que “utiliza haces de alta energía para tratar tumores”.
“Mi tumor era tan raro que no había procedimiento”, explicó a Mega Noticias Menem Bolocco, asegurando que originalmente en Chile había recibido la opción de someterse a quimioterapia, aunque llena de complicaciones.
“Iba a tener un tratamiento de dos años de quimioterapia, donde no iba a poder ver a nadie. Una radioterapia, pero casi sin supervivencia”, recordó.
Debido a aquellas complicaciones del tratamiento tradicional, Menem recordó que “a mi mamá le dijeron que me iba a quedar del porte que era (entonces), que era 1,71; hoy mido 1,83”.
Asimismo, le aseguraron que con el tratamiento había posibilidades de quedar ciego, así como también sufrir problemas de audición, sin embargo, a día de hoy no sufre ninguna de estas posibles consecuencias.
Ahora, cuatro años después de aquel difícil 2018, Nemen comenta que, junto a su madre, crearon la Fundación Care, la cual tiene como desafío crear un centro oncológico en el cual se pueda implementar la protonterapia, que pudo recibir el joven de ahora 18 años, en Chile.
De acuerdo a Menem, la idea de traer la terapia de protones tiene el objetivo de que “todos los niños que nazcan acá y en Sudamérica también tengan la posibilidad que tuve yo de poder seguir con una vida buena y sin límites”.
El pasado jueves, la fundación creada por la exMiss Universo tuvo el Seminario internacional Care, el cual abordaría temas sobre la lucha e inversión contra el cáncer.
Sin embargo, la modelo, influencer y empresaria no pudo asistir debido a que se encontraba contagiada por COVID-19.
Esta no es la primera vez que Máximo Menem habla de su diagnóstico. En enero de este año, el joven de 18 años compartió con la revista Velvet cómo vivió esa época.
“Mi mamá murió y nació de nuevo. Nos hicimos más cercanos que nunca y, según yo, ahora nos entendemos mucho mejor que antes”, confesó entonces.
Aunque no recuerda cómo ocurrió todo, aseguró que “me sentía mal y mi mamá me mandó a la clínica (…) jamás pensé que me iba a morir. Nunca, nunca, nunca, nunca. Yo siempre supe que iba a estar bien (…) Además, mi mamá estaba demasiado tranquila o así me lo hizo sentir”, contó.