La pandemia de coronavirus hizo cambiar la industria de la televisión, que en Chile ya venía experimentando una fuerte crisis económica y social. Basta recordar los llamados a no ver la pantalla chica durante el Estallido Social o incluso los intentos de quemas de algunos canales.
Fue en ese escenario donde los departamentos asumieron un rol de mucha importancia, no sólo para informar de la contingencia, sino que también para educar a la población sobre las medidas sanitarias.
Pero como si esto fuera poco, el plebiscito sumó otro desafío y el debate por la Nueva Constitución y proceso constituyente se convirtió en un nuevo tema de conversación generalizada, que permitieron que los programas políticos volvieran a la pantalla chica.
“Creo que hicimos el aporte de construir con análisis, conversación y debate; siempre con mucho respeto, que es una cuestión que a mí me interesa mucho como profesional”, aseguró el periodista Iván Valenzuela, conductor de Mesa Central.
Por su parte, añadió que todo lo vivido en cuanto al plebiscito ha “muy interesante, porque yo creo que el proceso constituyente abrió una expectativa, una esperanza y optimismo en la gente. Yo en general, aunque suelo ser bien realista, tiendo a ser más optimista que pesimista con todo esto”, opinó.
“Siento que muchas personas ligadas a los medios vieron oportunidad de realizar una contribución práctica, concreta, de poder participar de algo que va a ser histórico. Creo que hay una ética ahí que es fascinante”, sostiene el comunicador, cuyo espacio incluyó una sección llamada ‘Quiero ser constituyente’.
“Ha sido un hallazgo, porque es súper impresionante lo que pasa con las personas. Primero porque descubrimos que hay miles de candidatos y personas que quieren ser constituyentes, también porque la gente le causa mucho interés”, reconoció.
¿Y él se atrevería a ser constituyente?
A pesar que de manera informal ha recibido comentarios de cercanos respecto a una candidatura a la convención, sostiene que prefiere “aportar desde otra vereda”.
“Nunca, jamás, no serviría (como constituyente), como tampoco serviría -y esto viene de antes de dedicarme a la cobertura política en el periodismo- para ser militante al interior de un partido, porque no soy muy disciplinado”, confesó.
“Cuando no estoy de acuerdo con las cosas, no lo estoy simplemente. Me parece mucho más fascinante cubrirlo, analizarlo con la gente que trabajo, pero de verdad nunca me ha llamado la atención”, indicó.
“Informalmente sí (me lo han comentado), varias veces, pero formalmente nunca, porque nunca le he dado margen a eso, de ninguna manera”, añadió.
Redes sociales
Gracias a su exposición en pantalla, y los programas que encabeza, el animador está expuesto a los clásicos comentarios de redes sociales.
“Siempre se agradece el recibimiento que hay en redes sociales. Imagínate que lo que hablas le resulta tan importante a las personas como para molestarse en emitir un comentario. También, en general, hay gente de la que hemos tenido una respuesta favorable, más allá que muchos digan que soy ‘muy de izquierda’ o de ‘derecha’, hemos tenido comentarios donde se valora el programa, el espacio y lo que hay, más allá de criticar ciertos aspectos”, comentó.