Este jueves se conoció que Sebastián Dávalos, hijo de la presidenta Michelle Bachelet y protagonista del caso Caval, presentó una querella contra Canal 13 por presuntas injurias del personaje Yerko Puchento (Daniel Alcaíno), solicitando 3.360 millones de pesos como indemnización.
El comediante había tratado irónicamente de “hijo del año” y “epidemia con aros” a Dávalos. Esto, en vivo y en directo en el programa Vértigo (Canal 13).
Entre otras, por esas razones es que, en detalle, pide 2.000 millones de pesos por daño moral; otros 1.000 millones de pesos por lucro cesante, “por no contar con las sumas de dinero que, de acuerdo al mercado (…) me habrían correspondido por mi actividad como funcionario público”; y otros 360 millones de pesos “debido a las suspensiones de trabajo profesional que fueron anulados producto del actuar doloso del demandado”.
La respuesta del involucrado directo, el actor Daniel Alcaíno, no se hizo esperar. En conversación con el diario de circulación nacional La Cuarta, dijo un lapidario “no me interesa“.
Alcaíno se justificó añadiendo que “es un tema de Canal 13”. “No quiero hablar de esto, gracias”, sentenció.
Estas palabras van en la misma línea de las declaraciones realizadas por el actor hace poco más de una semana. Respecto del cambio de formato de Vértigo, aseguró al programa de espectáculos Intrusos que es una situación “triste por el equipo”.
Y es que para él se trata de “un trabajo hecho por tanta gente que uno quiere. Pero son muchos factores, nosotros hicimos una temporada súper larga de 15 programas. Tal vez hay que analizar cosas, hacer reestructuraciones”
Otro caso emblemático de Yerko
El personaje Yerko Puchento ha sabido llevar las burlas a niveles que le causan más de un problema. Uno de los más bullados fue el que vivió con la ministra de la Secretaría General de Gobierno, Cecilia Pérez, luego de tratarla de “Monga”.
En el mismo espacio televisivo, en una emisión de fines de abril de 2017, el comediante expresó: “¿Saben qué? Fue bonito ver a Piñera en Fantasilandia. Ahí están los únicos avioncitos que no son de él. ¡Qué tierno! Dan vuelta y dan vuelta. Y después se metió a Monga y dijo ‘Cecilia Pérez, ¿eres tú…?’ ¡No, no! Es que pensó que estaba de público”.
Pérez incluso denunció el espacio televisivo ante el Consejo Nacional de Televisión (CNTV), pero la institución decidió no dar a lugar las quejas.
Un año más tarde, y tal como informó BioBioChile, la secretaria de Estado aseguró que ya dio “vuelta la página”.