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La modelo cubana y exchica reality, Lisandra Silva, habló con Eva Gómez en "ForEva" acerca de su quiebre con el bailarín Raúl Peralta. En la entrevista, Silva reveló que ambos sentían una falta de conexión, pese a creer en el amor. Según su relato, a pesar de temer al fracaso al romper una relación de cinco años con dos hijos, la meditación la ayudó a comprender que la felicidad no depende de seguir un rol social predefinido.

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La modelo cubana y exchica reality, Lisandra Silva, conversó con Eva Gómez en el programa “ForEva” sobre su ruptura con el bailarín Raúl Peralta.

Cabe recordar que, tras varios meses de rumores a cuestas, Silva confirmó el fin de su relación con el integrante de “Power Peralta” en abril de este año a través de sus redes sociales.

“Yo me ahogué en un vaso de agua porque todos mis ideales y todo lo que yo me había imaginado que era lo que iba a ser mi vida, o lo que era la vida perfecta, se desmoronó. Se desmoronó en mil pedazos”, partió declarando Lisandra a Eva.

Lisandra Silva reveló los motivos de su quiebre con Raúl Peralta

“Los dos sufrimos esta separación, porque sentíamos que ya no conectábamos, pero a la misma vez sentíamos que si nos separábamos, qué iba a ser de nuestras vidas“, continuó la cubana.

Silva dijo que tanto ella como Raúl creían en el amor, pero “a la misma vez como que ya estábamos energéticamente desconectados. Viviendo juntos, pero desconectados. Fue un paso bien duro mentalmente, a nivel emocional”.

La exchica reality confesó también que pensó en un momento que si terminaba su relación de cinco años, de la cual nacieron dos niños, se convertiría en un fracaso.

“Yo pensaba que si yo hacía eso (romper) era un failure; era un fracaso total, emocionalmente, para mi vida, para mi familia, para todas las personas que me seguían”, se sinceró.

Sin embargo, Silva contó que la meditación la ayudó mucho con su proceso: “En una noche de meditación, me senté en meditación, y fue como un cambio de chip. Entendí que uno para ser feliz no tiene, necesariamente, que seguir ese rol que te impone la sociedad de que tienes que estar casada y con hijos“, concluyó.