Este miércoles Sebastián Ramírez fue confirmado como jugador de la segunda edición de Gran Hermano Chile. La situación se dio en medio del matinal de CHV, donde la ganadora de la primera edición, Cony Capelli, se encontraba como panelista.
En el momento del anuncio, la bailarina no pudo ocultar su nerviosismo, sin embargo, no pudo emitir declaraciones al respecto, pues finalizó el programa. En la primera edición del reality ambos mantuvieron una relación dentro del reality que no terminó de la mejor manera, pues Ramírez dejó el encierro sin despedirse de sus compañeros.
No obstante, dentro de la fugaz relación tuvieron varios momentos de violencia verbal y psicológica entre ambos. Sumado a ello, el ‘chico reality’ tuvo varias conductas agresivas con sus compañeras de encierro.
Fuera del programa, Ramírez también tuvo polémicas, esto, pues su expareja lo acusó de haberla agredido con el palo de un escobillón con el cual la golpeó en el rostro. Sebastián fue detenido en ese entonces.
Por estos antecedentes fue cuestionada Cony Capelli en redes sociales, pues será una de las encargadas de conducir el “react” del programa junto a Jorge Aldoney. En este contexto, una seguidora le recomendó en Twitter: “Preferiría que Cony se quede sin canal a que tenga que estar en contacto con ese ahueonao” (sic).
A ello, la bailarina respondió en la misma red social, aclarando sus razones para quedarse en el canal.
“Yo me gané de manera honesta mi lugar. Estoy feliz y contenta. Desde mi lugar siempre compartiré mis pensamientos con honestidad“, prometió a sus seguidores.
A lo que agregó: “Para generar cambios debo tener una plataforma y no pienso, y es una locura pensar, que debo dejar lo que tanto me costó por acciones de otros”, cerró.