Carola Julio estuvo como invitada en el programa “Divina Conexión“, conducido por la hoy numeróloga Kenita Larraín. En tal espacio, la periodista reveló haber sufrido la pérdida de su primer hijo en 2001, para cuando tenía siete meses de gestación.
“Yo antes no podía hablar de esto (…) yo durante años no pude hablar. De hecho había gente que me decía (en ese entonces) ‘Ay Carola, yo sé lo que te pasó’, y yo decía ‘Por qué genero lástima’, más pena me daba“, le confesó Julio a la conductora en la sincera conversación.
La comunicadora le detalló a Larraín que aquel embarazo se trató de uno “no buscado”, según recogió el sitio de Radio Agricultura, por lo que explicó que nunca fue totalmente consciente de su estado.
Carola Julio revela haber sufrido la pérdida de su primer hijo
Carola relató que se enteró de la pérdida luego de un viaje: “Cuando yo llego de ese viaje, me tocaba una ecografía que me la fui a hacer al día siguiente y ahí me dijeron que mi guagüita estaba muerta. Tenía varios días de fallecida“.
Julio contó que no había podido creer la noticia, pues no había sentido ningún malestar ni dolor que le hubiese podido dar indicios de la situación.
“Me acuerdo que había una ventana al frente y yo digo ‘Voy a ir corriendo y voy a saltar’, mira la sensación que tuve: ‘Voy a saltar’. Yo creo que un poco pensando que era entre un sueño; de esta cuestión hay que despertar o esta cuestión yo no la quiero vivir“, expresó.
Tras ello, Carola tuvo que entrar en trabajo de parto: “Me pusieron la epidural (…) empecé con contracciones no sé, cinco o seis horas. Un dolor (…) yo decía por qué encima yo tengo que pasar por esto si ya hay un dolor interno, emocional, del corazón. Me dolía todo, me dolía la vida“.
“Nace y el doctor me dice ‘No es recomendable que lo veas’. ‘¿Cómo?’, le digo yo. ‘Yo quiero verlo’… Yo creo que eso lo tiene que decidir uno“, opinó Julio.
Así, contó que su mamá la acompañó a ver el cuerpo de su bebé. “Lo vimos y yo creo que ese fue el minuto como de convencerme de lo que me había pasado. Tomé consciencia, y ¿sabes que fue lo que más me gustó? Que yo vi un rostro como dulce, en paz y muy angelical“, dijo la periodista con voz quebrada.
Respecto al duelo en sí, expresó que es algo con lo que uno aprende a vivir. “Lo único que te ayuda en esto es el tiempo. No fui a ninguna psicóloga. Quizás me equivoqué porque me quedé mucho tiempo en la casa porque tenía tanta pena”, señaló.
“Finalmente fue el tiempo el que me ayudó a ser más fuerte y a entender lo que me había pasado”, confesó, agregando que en dicho periodo, sólo quería poder contar su experiencia más que recibir comentarios de apoyo.
“Yo iba caminando en la calle y había gente que me abrazaba, me escribían y yo decía ‘No quiero que me vean con lástima, quiero que me pregunten qué te pasó y yo contarles mi historia"”, contó.
“Nadie me preguntaba, sólo recibía el abrazo de contención, de apoyo, que lo agradezco, pero en ese minuto necesitaba hablarlo. Yo quería contarle a la gente lo que me había pasado“, cosa que hoy pudo hacer libremente en conversación con Larraín.