En marzo de este año, el exinstructor de Pelotón René O’Ryan quiso cumplir uno de los sueños de su esposa Marta Bontá: la acompañó en su salto en paracaídas.

La pareja realizó un salto tándem, donde un aprendiz se lanza junto a un instructor unidos por un sistema de doble arnés. El ejercicio lo realizaron en Concón y desde un avión Cessna.

La experiencia la capturaron gracias a un amigo que los grabó. “Ella quedó fascinada. Fue tanto lo que esperó por este salto que ahora quiere repetirse el plato. Pero tiene que ser improvisado. Cuando son saltos muy programados siempre pasa algo que lo arruina todo en último minuto”, aseguró en ese momento O’Ryan a Las Últimas Noticias.

El exmilitar reveló que habían planeado el salto desde hace años, pero que nunca habían podido concretarlo. “Hace cuatro años veníamos intentándolo y por alguna razón no podíamos. Una vez porque justo se nubló cuando nos estábamos por subir al avión, otra vez porque había mucho viento”, añadió.

En ese momento aseguró que se encontraba bien y estable del cáncer en etapa IV que le habían diagnosticado en diciembre del 2016. “Estoy paradito. Inicialmente, cuando me dieron el diagnóstico de cáncer al esófago, me dieron ocho meses de vida máximo”, dijo.

“No sé si tengo cáncer o no. Lo único que sé es que me siento fantástico. Para que alguien diga le gané al cáncer tiene que esperar cinco años desde el diagnóstico. Yo estoy feliz de estar vivo”, finalizó.

O’Ryan falleció el sábado en el hospital de Fach debido a las complicaciones de su enfermedad. Su amiga Pepa Celedón, afirmó que tres semanas antes sus médicos descubrieron un nuevo tumor en el hígado que era inoperable.

Sus funerales se realizarán este lunes a las 14:00 horas y contará con la presencia sólo de familiares y amigos cercanos.