La tarde de este jueves 21 de junio, la psiquiatra María Luisa Cordero fue detenida luego de atropellar a una asesora del hogar de nacionalidad boliviana, en la comuna de Las Condes.
Según contó entonces el diario La Cuarta, la “Doctora Cordero” se habría dado a la fuga tras el accidente, sin prestar auxilio a la afectada, quien resultó con lesiones leves.
De acuerdo al noticiero 24 Horas, el accidente habría ocurrido cerca de las 10:00 horas, mientras que la detención de Cordero se registró a las 13:00 horas, siendo llevada posteriormente a la 47a. Comisaría de Los Dominicos.
A una semana de eso, la profesional rompió el silencio en Mentiras Verdaderas de La Red. “No me arrepiento de nada porque yo no cometí ningún delito: a mí se me atravesó una persona”, dijo.
“Lo que me describieron a mí los testigos es que ella venía caminando y yo venía a muy baja velocidad. Entonces, cuando ella me vio, ahí hizo su rol de víctima y se puso a gritar”, señaló.
Según Cordero, ella sí prestó ayuda a la mujer y cuando le dijo que se encontraba bien y que no necesitaba ir a un hospital, la opinóloga decidió irse. “Me imagino que era una persona de baja escolaridad, con las emociones muy a flor de piel y falta de autocontrol. Ahí es cuando se tira al suelo. Como era potoncita, no debe haberle dolido nada. Me bajé, le pregunté qué le pasó y la recogí”, aseguró.
“Le digo yo: ‘¿cómo se siente?’. Ella me responde: ‘bien, señora’. Con don Augusto (conserje de su edificio) la levantamos, la vimos caminar. No tenía ninguna pierna coja. Pero resulta que la presunta lesión, según la radiografía, la tenía justo en el pie con el que estaba pisando, según el montaje que ella armó”, agregó.
Según su relato, varias horas después Carabineros llegó a su hogar para detenerla y realizar una alcoholemia. “Le echaron la culpa al pobre don Augusto que había llamado a Carabineros, pero no: fueron los patrones de esta señorita los que los llamaron. Me imagino que creerían que yo asesiné a la asesora del hogar. Y en un auto camuflado me fueron a buscar. Un auto recién chocado, común y corriente”, contó.
Mientras estuvo detenida, la mujer afirmó que se sintió desprotegida y que incluso temió “por la pérdida de mi autonomía después del accidente”. “Cuando entras en la condición de detenida, tú tienes la certeza absoluta de que no tienes ningún valor”, afirmó.
Finalmente afirmó que no le interesa que le pidan disculpas, porque para “ser enemigos de la Dr. Cordero hay que tener una serie de atributos”.