Cada Día de la Madre los publicistas buscan conquistar a la gente con comerciales llamativos y emotivos. Este año Entel decidió optar por el humor que de inmediato arrasó en redes sociales.
El spot muestra a un joven que está tomando desayuno con su mamá cuando alguien le pide que realice una imitación. En ese momento sorprende hablando como Miguel “Negro” Piñera.
El protagonista del comercial es Felipe Parra, un joven de 21 años que vive en Lota y trabaja como guardia de seguridad en el hospital de la ciudad. Si su rostro te parece familiar no es que esté viendo mal, sino que el comediante fue invitado en varias oportunidades en el programa Kamaleón de Stefan Kramer.
Poco a poco se convirtió en una especie de ahijado del imitador, guiándolo por el camino de la fama. “Conocí a Kramer cuando vino a la semana lotina del 2016. Ese día alguien me dio el dato de que en tal parte estaba el equipo de él, entonces me acerqué ahí y no me querían dar información, pero cuando les hice una imitación quedaron locos… entonces me dijeron donde estaba hospedado”, recordó en conversación con BioBioChile.
Ese día esperó al comediante durante más de dos horas hasta que por fin salió. Conversaron varios minutos y hasta le mostró parte de su trabajo. Kramer quedó impresionado, así que lo invitó a comer tras el show y luego lo llevó a su programa en TVN.
Una vida de imitaciones
“Llevo haciendo imitaciones hace varios años, unos 10 años más o menos. La mayoría de mis personajes son los que hace Stefan Kramer, pero yo les doy mi originalidad y mi toque, también estoy sacando mis propios personajes porque la gente me ha chaqueteado caleta“, reconoció Parra, quien consiguió darle un giro al destino.
Parra nació en una zona vulnerable, pero gracias al humor consiguió salir adelante.
“Yo siempre lo cuento en mis rutinas y me agarro de eso. Cuando chico sufrí problemas económicos, emocionales, depresión. -La imitación- me ayudó en su momento y me dí cuenta que muchas veces me salían igual o mejor que al mismo Kramer”, agregó.
Poco a poco comenzó a llamar la atención de la gente, quienes se dieron cuenta de su talento y lo incentivaron a seguir. “Empecé a imitar a mis profesores, al director, y ahí fui desarrollando el oído“, dijo.
Un futuro prometedor
Tras su paso por Kamaleón, su talento se hizo conocido por la gente, pero Felipe quiere tomarlo con tranquilidad. “Yo he tenido hartas propuestas y cosas, pero me lo tomo con calma. No me afano porque esto no es mi vida, pero sí me gusta hacerlo bien. Tengo claro que si voy a la televisión voy a llamar la atención un poco, pero imitando a los personajes de Kramer no voy a llegar muy lejos“, agregó.
“Tengo que crear un abanico de personajes, al menos los que yo tengo me salen bien, pero quiero ir de a poco porque cuando uno va muy rápido, se va muy rápido. Total soy muy joven todavía”, reconoció.
Además, no es una tarea fácil crear un personaje nuevo. “Los personajes propios son el doble de pega, porque uno tiene que adentrarse en la esencia del persona no solamente en la voz, sino que en los gestos y la personalidad que tiene. Eso marca la diferencia entre los imitadores y los comediantes que pueden hacer parodia”, dijo el joven humorista.
Actualmente sigue trabajando como guardia, aunque no rechaza las invitaciones a presentarse en diferentes zonas de Chile. Además abrió un canal de Youtube donde sube videos de sus imitaciones.
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