Esta semana llegó a los cines la tan esperada cinta de Ridley Scott, Gladiador II, la secuela de la primera película estrenada en el 2000 con Russell Crowe en el papel protagónico.
La producción retoma la historia tras la muerte de Máximo Décimo Meridio, veinte años después tras la muerte de Cómodo, cuando los emperadores gemelos, Caracalla (Fred Hechinger) y Geta (Joseph Quinn), heredan el poder.
Junto a Lucius (Paul Mescal), los personajes se roban toda la atención gracias a sus particulares personalidades. Los gemelos emperadores en la cinta son despiadados y rozan constantemente la locura.
Por ello, pese a la voluntad del fallecido Marco Aurelio, los hermanos disfrutaban de las peleas a muerte en la arena, donde incluso llevaron a cabo batallas navales y con animales.
Los gemelos Caracalla y Geta
Pese a que en la cinta se hace alusión a los gemelos como si fueran la encarnación del mito romano de Rómulo y Remo quienes fueron criados por una loba, diciendo que “algo de animales” tienen, lo cierto es que Caracalla y Geta sí existieron en la antigua Roma.
De acuerdo a lo que consigna El Español, que el poder estuviera en manos de dos líderes no era extraño en la época, de hecho era señal del declive que enfrentó el imperio, lo que deja entrever la elección de los personajes para Gladiador II.
Su llegada al trono inició con el emperador Severo, padre de Caracalla (Hechinger) y Geta (Quinn), quien en 198 d. C. nombró al primero como su co-emperador. Más tarde, en 209 d. C., hizo lo propio con su otro hijo, Geta.
Pero la paz que reinaba en la antigua Roma se rompió cuando Severo murió. Los gemelos emperadores jamás se llevaron bien y cuando se hicieron con el poder, ambos vivían con el miedo constante de ser asesinados por el otro.
Por esta razón, se vivió una división interna de la dinastía, la que se comenzó a concretar con la separación de sus habitaciones y más tarde del propio palacio, con el fin de que Caracalla y Geta jamás tuvieran que encontrarse.
Los gemelos emperadores tuvieron trágico final. Aunque en la cinta se muestra que ambos se reúnen gracias a Macrino (Denzel Washington), siendo este último el que asesina a Geta, en la realidad el encuentro fue coordinado por su madre, Julia Domna, a petición de Caracalla.
Según consigna el medio español, nunca quedó claro si fue Caracalla el que asesino a Geta o si bien fue un encargo a uno de sus súbitos, lo real es que muchos artistas han plasmado esta muerte en brazos de su madre.
Tras el asesinato, el emperador ordenó una damnatio memoriae, un recurso que buscaba -en palabras simples- borrar todo rastro de su hermano de la historia, por lo que se masacró a todos aquellos que fueron sus aliados y seguidores en vida.
Más tarde, 217 d.C, Caracalla fue asesinado tras la orden de Macrino. Tal como detalla National Geopgraphic, cuando viajaba de visita a un templo local cercano a Carras, detuvo a su séquito para ir al baño, pero cuando todos se giraron por respeto, un soldado lo apuñaló por la espalda.
Tal como se muestra en la cinta de Ridley Scott, Macrino se quedó con el poder, pero en lugar de morir a manos del Gladiador, alcanzó a gobernar durante un año antes de su muerte en Capadocia.
Las críticas de los historiadores
Igual que como ocurrió en la primera película, la producción ha sido objeto de críticas de parte de los historiadores, por su poco apego a la historia real de la antigua Roma.
La aparición de los tiburones, un periódico y café, además de otros detalles, han hecho enfurecer a los expertos más avezados, algunos que incluso han dicho que es “una basura de Hollywood”.
Sin embargo, cabe recalcar que Gladiador II es una película de ficción que en ningún momento busca relatar o educar sobre la historia real de la antigua Roma.
La épica actuación de Joseph Quinn
Dada la expectativa que ha generado la cinta y el antecedente de los cinco Óscar que consiguió la primera, solo hace prever que la segunda entrega también figurará entre los nominados a los mismos premios de 2025.
Por ello, Paramount Pictures ya postuló a Pedro Pascal como Mejor Actor de Reparto, pero no es el único, pues Joseph Quinn, el encargado de personificar a Geta, también forma parte de la lista, en la que podría tener oportunidades de quedarse con la estatuilla.
BioBioChile y Andes Films organizaron en Concepción el Avant Premiere de esta nueva producción, dirigida por Ridley Scott, donde la actuación del británico no fue menos que brillante.
El actor que se popularizó por su trabajo en Stranger Things logra el perfecto equilibrio entre un emperador desquiciado y megalómano, sin rayar en la exageración.
Sus escenas con Pedro Pascal provocan desconfianza, pues es consciente de su poder y es difícil saber si realmente lo quiere o solo busca mantenerlo a raya.