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La serie Loki tuvo un espectacular final, alabado por la crítica y el público, y convirtiendo al complejo personaje en tal vez el más importante del UCM en este momento.
La segunda temporada de Loki llegó anoche a su fin, coronando al personaje de Tom Hiddleston como el mejor desarrollado del Universo Cinematográfico de Marvel (UCM).
Si no has visto el capítulo… a partir de aquí vienen los spoilers.
“Un glorioso propósito” fue el título del capítulo 6 del segundo ciclo, que parte con Loki usando sus nuevos poderes que le permiten viajar en el tiempo con el objetivo de impedir que el telar explote y junto con ello innumerables líneas temporales.
Loki lo intenta todo, pasa siglos estudiando física teórica y retrocede miles de veces en distintos puntos de la historia para intentar detener el colapso. Pero todo falla y es ahí cuando descubre que su misión va mucho más allá.
En una hermosa secuencia, Loki camina hacia el telar temporal, lo destruye e impide que las ramas temporales mueran sosteniéndolas una a una y dándoles vida con su magia.
Así, Loki erige un trono dorado en lo que queda de la Ciudadela del Tiempo y entrelaza todos los hilos temporales a su alrededor, construyendo un nuevo telar en el que no se sacrifica ninguna línea en favor de otra. A medida que la cámara se aleja, vemos que las ramas forman una figura que evoca al Yggdrasil, el árbol sagrado de la mitología nórdica que conecta todos los mundos.
De Dios de Las Mentiras a Dios de las historias… y el multiverso
El episodio nos muestra el viaje final del travieso hermano de Thor, quien dejó atrás su rol de villano como Dios de las Mentiras para un propósito más noble: convertirse en el gran Dios protector del multiverso y el tiempo, aunque esto le signifique confinarse a la soledad eterna.
De hecho, el traje que usa en esta parte final es un guiño directo a los cómics, donde Loki se convierte en el Dios de las historias.
“Ya sé la clase de Dios que debo ser…por ustedes y por todos nosotros”, le dice a sus amigos justo antes de partir a cumplir con su glorioso propósito.
En una hermosa, pero agridulce escena final, vemos a Loki sereno, sonriendo al haber salvado al multiverso y conseguido su ansiado trono, pero con una mirada profundamente triste al alejarse de todo lo que amaba.
Cargando con el peso del UCM
La escena final parece una metáfora no sólo de lo que pasa en el multiverso de la historia de Marvel Studios, pues en este momento la serie Loki parece haber sido la gran salvación de la franquicia que últimamente había recibido múltiples críticas por presentar productos mediocres en términos argumentales e incluso gráficos.
Loki no sólo se coronó como un producto de primer nivel, con hermosa fotografía y efectos especiales, además nos presentó el mejor desarrollo de personaje de todo el UCM y una de las historias mejor contadas hasta ahora.
Si Marvel sacara más producciones como ésta y redujera el número de productos de relleno, tal vez podría cimentar su camino para recuperar la gloria que perdió tras Avengers: Endgame.
Otra cosa que llamó la atención de este episodio final, es que no hubo escena post créditos. Muchos probablemente se quedaron esperando hasta el final para ver si aparecía alguna pista de lo que sigue, pero sus creadores decidieron terminar así la historia.
¿Qué viene ahora?
Por ahora no hay certeza de una tercera temporada en Disney+, pues sus creadores han dicho que se consagró desde el inicio como una serie de dos ciclos, pero la verdad es que con Marvel Studios nunca se sabe.
Tampoco sabemos si Loki volverá a aparecer en el UCM, pero es probable que lo haga al desarrollarse la trama de la guerra multiversal.
