Basada en hechos reales, la mini serie de Amazon Prime Noticia de un secuestro aborda uno de los secuestros perpetrado por narcotraficantes más conocido de Colombia y del que incluso el escritor Gabriel García Márquez se inspiró para publicar su novela homónima que relata dichos hechos ocurridos a principio de los noventa.
La adaptación, dirigida por el reconocido cineasta chileno Andrés Wood, narra a lo largo de sus seis episodios el calvario que atravesó un pequeño grupo de personas durante siete meses y la lucha de sus seres queridos para conseguir su libertad.
La historia es protagonizada por la actriz colombiana Cristina Umaña, quien interpretó a la periodista Maruja Pachón, una de las prisioneras en la serie. En conversación con BioBioChile, Umaña habló sobre su personaje y contó detalles de su experiencia en la producción.
Preparación del personaje en “Noticia de un secuestro”
“Cuando quedo en el proyecto, lo primero que hago es volver a leer el libro y buscar todos los documentos históricos y periódicos que hablaron sobre Maruja. Además, comencé a trabajar con coaches de voz y gestualidad, porque ella tiene un acento bogotano muy particular y una gestualidad bastante característica”, explicó la estrella colombiana.
La protagonista de la mini serie tuvo la oportunidad de platicar con la propia Maruja Pachón y conocer de primera fuente datos que no aparecieron en ningún lado respecto a su intimidad.
Sin embargo, una de las situaciones que llamó la atención de Umaña y que cambió el curso de su trabajo fue cuando comenzaron los ensayos previos a la grabación. “Cuando llegó al set, Andrés nos dice ‘¡Olvídate de todo! No quiero nada, ni acentos, ni gestos"”, recordó Cristina entre risas.
“Uno de los grandes retos de la serie fue soltar mi lugar seguro y dejarnos llevar de la mano de Andrés Wood y Julio Jorquera. Fue bonito descubrir como en el cuerpo queda una memoria que pude usar de manera muy natural y genuina para sostener el personaje durante todo el rodaje. Siento que funcionó muy bien”, expresó la actriz.
Trabajo con Andrés Wood y Julio Jorquera
A cargo de esta producción estuvieron los cineastas chilenos Andrés Wood (Machuca, Violeta se fue a los cielos y Araña) y Julio Jorquera (Mi último round y El Tiempo Real), quienes complementaron su trabajo con el director colombiano Rodrigo García, hijo del escritor Gabriel García Márquez.
“Trabajar con Julio y Andrés fue de los regalos más grandes de mi carrera. Ambos son excelentes directores, con peticiones simples, pero que se encargan de generar una relación de tanta confianza, que el actor es capaz de sumergirse en la visión que ellos tienen en su cabeza”, precisó la protagonista de la serie.
“Para mí fue un sueño hecho realidad trabajar junto a Rodrigo García, a quien admiro profundamente. El solo hecho de conocerlo, interactuar con él ha sido maravillo, porque es un ser humano increíble”, agregó.
Al ser una historia que causó un gran impacto en la sociedad colombiana, Cristina destacó que en esta ocasión los hechos fueran narrados a través de una visión diferente.
“A mí me encantó que un extranjero diera su mirada sobre nuestra situación, porque siento que algunas veces los toros se ven mejor desde la barrera. Es una realidad que nos ha dolido y confronta tanto que no hemos sabido cómo contarla, nos cuesta”, aseveró la actriz.
“La mirada externa que Andrés le dio fue muy especial, los comentarios que he escuchado han sido positivos sobre el resultado de la serie. Se trata de ver nuestra propia historia, pero que haya una conversación y una reflexión al respecto”, comentó.
Momentos preferidos del rodaje
La producción está cargada de escenas tensas que muestran cómo fue la cruda experiencia de este grupo de cautivos. Cristina Umaña confesó que hubo momentos complejos en que tuvo trabajar para ponerse en los zapatos de una víctima de secuestro y representarlo de forma fidedigna.
No obstante, también hubo escenas más creativas donde se jugó con el realismo mágico propio de la obra escrita por García Márquez.
“Me gustaron mucho las escenas de bailes, porque eran momentos de la memoria de ella (Maruja), que podían ser un sueño o tal vez un recuerdo. Me pareció bellísimo, era una forma en la que el personaje podía expresar su pasión como mujer o el amor hacia sus hijos”, recordó.
“En la secuencia en la que se llevan a Marina Montoya, en donde nos quedamos Beatriz y yo, se ven tintes de lo que paso. En el rodaje, Andrés puso a rodar la cámara e hizo que nosotras entráramos a un torbellino emocional. En la serie solo se ven momentos, pero para mí fue una exploración como actriz y ser humano muy profunda”, expresó la artista colombiana.
Pero sin duda alguna, para Cristina una de las escenas más complejas del proyecto fue la liberación de los prisioneros. “Yo tenía mucho miedo de esa escena, yo me decía ‘Dios mío esto cómo va a ser’, o sea, ¿cómo expreso que vuelves a recuperar tu libertad después de siete meses?, fue muy difícil”, reconoció.