Amenazas y acuerdos con El Padrino: el rol real de la mafia italiana en la película

La película El Padrino (1972), dirigida por Francis Ford Coppola, es una de las mejores películas de los últimos años, según la prensa especializada y los fanáticos del cine.

Esta historia relata la vida de Don Vito Corleone, patriarca de una familia italiana y jefe de la mafia en Nueva York, quien deberá defender su negocio y su familiar, frente a sus enemigos que quieren verlo muerto.

Tras su paso por grandes festivales y ceremonias del cine, ganando importantes galardones en los premios Oscar, Globos de Oro y BAFTA, quedó grabada en las mejores listas de cine, además de ser una película muy bien lograda tanto en guion, producción y actuación.

Con el avance de los años, se han descubierto varios misterios tras el filme, el cual no estuvo exento de problemas durante la producción. En el último tiempo se han estrenado algunos proyectos audiovisuales que tratan este tras bambalinas de la película. The Offer fue la última en estrenarse.

Esta serie va más allá de lo que es El Padrino, si no que relata la pesadilla que tuvo que vivir el equipo de producción y específicamente el jefe de este departamento, Albert “All” S. Ruddy, al realizar sus investigaciones en terreno para la película de la mafia italiana.

El Padrino: la mejor película de mafia que casi no fue hecha

Mario Puzo fue quien le dio vida a la historia de la familia Corleone en el libro El Padrino.

Al principio la idea de crear la historia sobre esta familia mafiosa no fue aceptada por el estudio de cine Paramount Pictures, debido a que anteriormente produjeron la película de mafia “The Brotherhood”, sin éxito en taquilla.

Cuando vieron que el libro de Puzo se convirtió en un éxito best seller en el país, la productora decidió darle luz verde al proyecto de la mano de Albert “All” S. Ruddy, quien era conocido por desarrollar sus películas con un bajo presupuesto.

Por temas de presupuesto, el proyecto fijó sus grabaciones en Nueva York, Estados Unidos, además fijo la ambientación del filme en la época de 1970 para abaratar costos de diseño de producción.

Durante la etapa de pre-producción, ya anunciado el proyecto, la agrupación de los Derechos Civiles de los Italoestadounidenses mostraron su incomodidad con el proyecto y realizaron protestas donde reclamaban que este tipo de películas los encasillaba en el mundo de la mafia.

Pero eso no fue todo, ya que después comenzaron a recibir amenazas de bombas y diversas intimidaciones desde la Cosa Nostra, agrupación italiana ligada a la mafia real, quienes se manifestaron para que no se hiciera la película.

Quien tuvo que cuidarse más que nadie fue Al Ruddy, quien incluso recibía llamadas con amenazas hacia su familia.

Es más, un día le pidió a Bettye McCartt, productora ejecutiva, si podían cambiar de autos para que no lo reconocieran. Durante la noche, ella se llevó el vehículo de Ruddy, el cual fue encontrado por los amenazantes y rompieron todos los vidrios el auto.

La mafia involucrada en la producción

Frente a los encuentros con la mafia de Nueva York, Paramount Pictures decidió entablar conversaciones con ellos para que no entorpecieran la producción y no sufrir algún hecho que pudiera costarle la vida a cualquier integrante del staff.

Según publicó DailyMail, una de las peticiones para poder filmar El Padrino en las calles de Nueva York era sacar la palabra “mafia” y “Cosa Nostra” del guion y la película completa. Al Ruddy debió acceder, concretando un acuerdo histórico con la mafia.

Incluso, el pacto fue presentado por el mismo productor junto al director de la Liga de derechos civiles italoamericanos, Joseph “Joe” Colombo, frente a los medios de comunicación en una rueda de prensa.

Antes de llegar a esta resolución, la comunidad, que estaba en contra de la filmación de la película, buscó otra manera de frenar el desarrollo del proyecto.

Su propuesta fue ofrecerle a Paramount Pictures la suma de 1 millón de dólares, para no realizar El Padrino.

Continuando una producción manejada

Las grabaciones continuaron luego de la aprobación de la productora, mientras Marlon Brando fue el elegido para protagonizar el filme, y finalmente los italoamericanos fueron seducidos por la magia hollywoodense.

Durante la escena que da inicio a la película, donde se celebra el matrimonio de la hija de Don Vito Corleone, las familias italoamericanas comenzaron a presionar a la producción con que contrataran a su gente para el filme.

Tanto así que les hicieron caso y llevaron a algunas personas de la Liga para ser extras durante el matrimonio. Entre ellos al fotógrafo oficial de la Liga de italoamericanos, el cual tuvo su minuto de fama.

Aunque no fue el único en conseguir un rol relevante, quien obtuvo un protagonismo importante en el filme fue Lenny Montana.

Lenny Montana, la unión oficial de El Padrino con la mafia

Uno de los últimos roles que faltaba para casting era el de Luca Brassi, el sicario personal del padrino, hasta que conocieron a Lenny Montana, uno de los guardaespaldas y sicarios reales de las grandes familias italoamericanas.

La primera escena de Montana fue con Marlon Brando, donde Francis Ford Coppola notó el nerviosismo y miedo del actor amateur, quien igualmente hizo de maravilla su papel.

Fue así como la grabación de la escena forjó la relación entre los italoestadounidenses y la producción de El Padrino, quienes crearon una alianza de paz donde ambas partes salían beneficiadas.

Aunque no todo fue como lo esperaban, durante las últimas grabaciones de El Padrino, donde asesinaban a tiros a uno de los personajes, Joe Colombo fue herido durante el evento del Día de la Unidad Italiana. Esto generó un quiebre tanto en las familias italianas de Nueva York y la Liga.

“La portada de la revista Time era el arte imitando a la vida. Nos tenían con armas y, se hizo realidad”, fueron las palabras del productor Al Ruddy durante la grabación del documental “The Godfather and the mob”.

Luego de dos años de intimidación y problemas con la mafia, El Padrino se estrenó en 1972 en los cines de Estados Unidos.

El revuelo mediático de la producción y la relación con la mafia, atrajo la atención de miles de espectadores, marcando éxitos de taquilla y rejuveneció Hollywood con una historia épica.