El director español Pedro Almodóvar expresó este jueves su “absoluto rechazo” al acto de violencia de Will Smith en los Óscar y a su discurso posterior, que define como “fundamentalista”: “No se defiende ni protege a la familia a base de hostias (golpes), y no, el demonio no se aprovecha de los momentos culminantes para hacer de las suyas”.
Smith marcó la polémica el domingo pasado luego de que abofeteara al cómico Chris Rock, quien realizó una broma en torno al aspecto de su esposa, Jada Pinkett Smith. Minutos después, el intérprete fue galardonado por su trabajo en la cinta King Richard, dando un discurso donde pidió disculpas a la Academia.
De todas formas, según relató el director español en elDiario.es, Almodóvar estuvo a cuatro metros del polémico ataque de Smith a Rock: “En los planos generales picados yo soy la cabecita blanca que se ve en la foto”, remarcó.
Una crítica cerrada
“Yo estaba muy cerca de los protagonistas y me produce una sensación de absoluto rechazo lo que vi y lo que oí”, afirmó sobre el incidente desencadenado por un chiste sobre la alopecia de la mujer de Smith, y sobre sus justificaciones cuando recogió el premio a mejor actor.
En un discurso “que más bien parecía el de un predicador”, según el cineasta, Smith, entre lágrimas, afirmó: “Denzel Washington me avisó: en el momento más alto es cuando el demonio va a por ti”.
“El demonio, de hecho, no existe”, zanjó Almodóvar sobre “un discurso fundamentalista que no debimos escuchar ni ver”. Añadiendo que “algunos agradecen que fue el único momento real de la ceremonia, se refieren a ese monstruo sin cara que son las redes sociales”.
“Para ellos, ávidos de carroña, fue sin duda el gran momento de la noche”, subrayó Almodóvar, quien se niega a que “ese episodio marque la gala y sea el protagonista de una ceremonia donde ocurrieron muchas más cosas y de mucho mayor interés”.
En esa rama, Pedro Almodóvar recordó el triunfo de Drive My Car como Mejor Película Extranjera en los Óscar, que para él es “sin discusión la mejor película del año” y también el documental Summer of Soul, que, a sus palabras, fue su favorito.
En su escrito además remarcó cómo aprovechó su viaje a Los Ángeles para encontrarse con algunos actores “pensando en el casting de la película de Cate Blanchett”, basada en cinco relatos de Lucia Berlin (extraídos de su “biblia” “Manual For Cleaning Ladies”).