La liga de la justicia se convirtió en una de las películas más polémicas de la historia del cine, y no precisamente por su trama sino por todo el drama que ocurrió en el detrás de escenas.
No sólo el público terminó viendo una versión completamente diferente a la planeada originalmente, sino que sus actores tampoco lo pasaron muy bien.
Ben Affleck reconoció esto en una entrevista con The Hollywood Reporter, donde aseguró que sufrió en el set del filme, pero que hubo algo que hizo que todo ese mal rato valiera la pena.
“Hice Batman porque quería hacerlo para mis hijos”, aseguró el actor. “Quería hacer algo que le gustara a mi hijo. Quiero decir, mis hijos no vieron a Argo“, afirmó haciendo referencia a su galardonada película de 2012.
“Zack [Snyder] quería hacer una versión de la serie de novelas gráficas de Frank Miller Dark Knight, que es una muy buena versión. Desafortunadamente, hay muchas razones por las que las cosas son como son en el negocio del cine, y solo porque tu cara esté en el póster no significa que estás dictando todas esas cosas”, añadió.
No obstante, Affleck reconoció que hubo un momento que compensó todos los malos ratos. “Me puse el traje para la fiesta de cumpleaños de mi hijo, y valió la pena cada momento de sufrimiento en la Liga de la Justicia“, aseguró.
Alcohol
El intérprete también reconoció que fue en esa época donde comenzó a enfrentar sus problemas con el alcohol, que terminaron con él en rehabilitación.
“Empecé a beber demasiado en la época de la Liga de la Justicia, y es algo difícil de afrontar y manejar. He estado sobrio por un tiempo ya y me siento realmente bien, saludable, como nunca me había sentido”, agregó.
Affleck también aconsejó a las personas que no son alcohólicos declarados, a ser honestos, íntegros y asumir sus responsabilidades. “Es un buen conjunto de cosas que te enseñan. Me tomó un poco de tiempo conseguirlo, tuve algunos deslices, como la mayoría de la gente, pero me siento muy bien”, reconoció.
“Si supieras cuántos actores, directores y escritores son alcohólicos o compulsivos de alguna manera, es la cosa más común del mundo en Hollywood. ¡Trabajé con actores que aparecieron borrachos en el set! Y yo no era así. Yo bebía solo en mi sala de estar y llegué a desmayarme por el whisky. Pero hoy estoy sobrio”, concluyó.