Heath Ledger puso a sus pies a la crítica mundial por su trabajo en Brokeback Mountain, donde interpretó a un vaquero que luchaba contra sus sentimientos homosexuales.
Corría 2005 y el intérprete australiano tomó el rol con tal seriedad que se negó a reírse en los premios Óscar de la historia de amor que mostraba la película.
El australiano fue invitado como presentador a la ceremonia de 2007, pero no aceptó debido a una broma homófoba que le pidieron desde la producción.
Así lo reveló su amigo y coprotagonista Jake Gyllenhaal en una entrevista con la revista Another Man.
“Recuerdo que querían hacer una apertura para la ceremonia de los Óscar que era como una broma respecto (de la relación homosexual de la película), y Heath se negó”, recordó.
“En ese momento yo estaba como, ‘Oh, está bien … lo que sea’. Yo estaba como ‘es por sana diversión’. Y Heath dijo: ‘No es una broma para mí, no quiero hacer ninguna alguna broma al respecto’”, aseguró.
“Eso es lo que me gustaba de Heath. Nunca bromeba sobre eso. Si alguien quería hacer un chiste sobre la historia o lo que fuera, decía: ‘No. Esto es sobre el amor”, sentenció.
En 2006, Ledger fue nominado como Mejor Actor por su rol en la cinta, sin embargo, perdió el galardón en manos de Philip Seymour Hoffman, quien se llevó el premio por su trabajo en Capote.
Finalmente se llevó el galardón de forma póstuma, por su trabajo en Batman: The Dark Knight, donde interpretó a Joker, rol que lo hizo merecedor del premio a Mejor Actor de Reparto.
Heath falleció el 22 de enero de 2008 en su departamento en Nueva York, como resultado de una intoxicación de medicamentos accidental.