El jueves se estrenó en Chile una de las películas más esperadas del año: Star Wars: Episodio IX – El ascenso de Skywalker.
La cinta, que cierra la saga Skywalker, ha ganado malas críticas de los expertos en cine, pero ha obtenido mejor reacción de parte de la audiencia que su antecesora, el Episodio VIII – Los últimos jedi.
Y para cerrar una historia que ha tomado más de 4 décadas, Lucasfilm decidió incluir a la comunidad LGBT, poniendo por primera vez en una película de Star Wars a una pareja homosexual.
El momento ocurre en el final de la película, cuando dos mujeres de la Resistencia se abrazan y se besan frente a la cámara.
Un par de minutos más tarde, vuelven a aparecer, esta vez tomadas de la mano y conversando con otro integrante del grupo rebelde.
Si bien se trata de personajes incidentales, el momento es histórico para la saga y para la comunidad LGBT, que nunca había sido considerada en estas cintas extremadamente populares a nivel mundial.
El director JJ Abrams ya había adelantado que ocurriría un momento significativo de este tipo antes del estreno, algo que confirmó a la revista estadounidense Variety.
“En el caso de la comunidad LGBTQ, es importante para mí que esas personas, que van a ver esta película, sientan que están siendo representadas en este filme”, afirmó.
