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Las hijas de Bruce Willis, Tallulah y Scout, compartieron en Instagram emotivas fotografías del actor, quien padece demencia frontotemporal, donde se le ve junto a sus hijas en momentos íntimos. En las imágenes se destaca un cartel que dice "Best dad ever" (el mejor papá del mundo) sostenido por Willis, mostrando la conexión y amor familiar a pesar de los desafíos de su enfermedad. La familia ha enfrentado con valentía la difícil situación, con la esposa de Willis, Emma Hemming, destacando la enseñanza sobre el cuidado y amor en medio de la tristeza que ha dejado el diagnóstico del actor.

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Con motivo de la celebración del Día de Acción de Gracias, las hijas de Bruce Willis, Tallulah y Scout, publicaron nuevas fotografías del actor, quien fue diagnosticado con demencia frontotemporal a comienzos del 2023.

Las artistas compartieron la imagen en su cuenta de Instagram, donde se puede ver al hombre detrás de “Duro de matar” sentado en un sofá junto a Scout, mientras Tallulah los observa sentada en el piso.

En la fotografía también se logra notar que el actor sostiene entre sus manos un pequeño letrero con la frase “Best dad ever”, lo que se traduce como “el mejor papá del mundo”.

En la segunda fotografía se puede ver como Bruce Willis apoya tiernamente su cabeza en la frente de Scout.

Debido a su diagnóstico, el actor ha ido perdido gradualmente las capacidades del lenguaje, como dificultad para hablar o de hilar frases, además de otros síntomas relacionados con la demencia y la afasia.

Por esta razón, el artista ha dejado el mundo público por lo que sus apariciones son cada vez menos frecuentes. Por ello, la última vez que fue visto fue en abril de este año.

En esa ocasión fue visto dentro de un vehículo en Australia trasladándose a una reunión familiar, donde se le vio de buen ánimo.

Anteriormente la actual esposa de Bruce Willis, Emma Hemming, se refirió al diagnóstico del actor, ocasión en la que declaró: “Es difícil saber si es consciente o no de lo que le sucede (…) La demencia es difícil, es lo que estoy aprendiendo. Es duro para el paciente y es duro para la familia. Creo que fue una bendición y una maldición… El diagnóstico de mi esposo les está enseñando mucho sobre el cuidado y el amor, y eso es algo hermoso en medio de la tristeza“.