Si tuviéramos que mencionar hermanos de artistas que logran triunfar en la música, Beyoncé y Solange Knowles estarían a la cabeza de ese listado.
Las hermanas, criadas en Houston, al sur de Estados Unidos, tienen 5 años de diferencia, pero el mismo talento, aunque en diferentes áreas.
Mientras que Beyoncé está enfocada más en el pop y es una artista de renombre internacional logrando con agotar una y otra vez los conciertos de su gira mundial, Renaissance World Tour, la vida de Solange es muy distinta.
Su rumbo tomó un camino distinto, pero también con mucho éxito, uno que es reconocido por la primera, quien no duda en apoyarla incluso en los momentos más duros que vivieron como familia.
En esto se incluye el incidente que las puso en la primera plana hace 10 años, cuando Solange usaría todo lo que podía para defender a la autora de Single Ladies.
Solange Knowles: mucho más que la hermana de Beyoncé
Aunque tienen cinco años de diferencia, la música siempre estuvo en la vida de las ‘Knowle’, pero Solange tomó un rumbo muy diferente del de Beyonce.
En un inicio estuvo a la sombra de su famosa hermana, supo como tener un espacio importante en la escena musical a punta de trabajo.
Así lo retrata el documental de Arte.tv, Beyoncé & Solange: Die Queen of Pop und ihre Soul-Sister (Beyoncé & Solange: La reina del pop y su hermana del alma), que sigue la carrera de ambas artistas.
“Solange era la niña que necesitaba hacerse notar pero a la que no se le escuchaba”, indicó David Lee Brewer, profesor de canto de Beyoncé, indica 20 minutes.
Conocía la dinámica familiar e identificaba la posición de la joven, quien se veía disminuida en beneficios, en favor del talento de su hermana.
“El rumbo de Solange era el neo soul y Beyoncé aspiraba a canciones pop número uno. Pero (Solange) ella sabía de lo que era capaz, y lo ha demostrado a todos”, comentan en el film.
Solange sabía que tenía talento y comenzó una carrera desde pequeña, acompañando a su familiar en Destiny’s Child y lanzando su primer álbum, Solo Star, a los 14 años.
Sin embargo tomó un descanso de la música y luego, en 2008, volvió a retomarla, comenzando un proceso que la llevaría a encontrar su estilo pasando por varias ciudades del mundo y publicando música que ya llamaba la atención.
Pero lo más importante: recorrió un viaje que la llevó a convertirse en una activista de su comunidad, llevando la música negra a otro nivel.
Activista en la música
Para 2016 lanzó el álbum donde fue definiendo su estilo musical, A seat at the table, que fusiona diferentes estilos de música como el funk, jazz y R&B, destaca La Vanguardia.
Se trata de un viaje a través de la supervivencia de la comunidad afroamericana en Estados Unidos, abarcando temas como la brutalidad de la policía, los prejuicios y las microagresiones diarias que vive esta parte de la sociedad norteamericana.
Vogue explica, “En F.U.B.U. (acrónimo de “De nosotros, para nosotros”), reivindica la propiedad de la identidad negra y la protege de la mirada lasciva de los blancos”.
Por este álbum tuvo su primer Grammy, ganó Mejor Interpretación de R&B, aunque también obtuvo otras nominaciones.
En 2019 su carrera seguía en alza con su cuarto álbum, “When I Get Home”, su segundo álbum, que vino acompañado de un film, y que califica como “El proyecto que me cambió la vida”.
Se trata de la continuación de su trabajo de 2016, un trabajo conceptual donde logra explicar su ciudad natal, Houston, en el que colabora con varios músicos de renombre como John key y Pharrel Williams.
El incidente del MET que dejó a Jay Z con marcas
En medio de la vorágine de la música y encontrar su estilo, hay algo que Solange no dejó de lado y esto es la vida pública, siempre al lado de la mayor.
Por lo mismo, a nadie le sorprendió que ella acompañara a la estrella y su marido, Jay Z., a la Met Gala que se celebró el 5 de mayo de 2014.
Mientras Sarah Jessica Parker sorprendía con un Oscar de la Renta o el matrimonio de David y Victoria Beckham lucía elegante en un look blanco; Jay Z, Beyoncé y Solange Knowles protagonizaron una de las peleas más recordadas del evento que organiza Ana Wintour.
Todo ocurrió esa noche en el ascensor del Hotel Standard, cuando Solange agredió físicamente a su cuñado, mientras que Beyoncé se mantenía al margen de la discusión y un miembro de seguridad intentó tomarla para evitar que continuara pegándole a Jay Z.
Las imágenes que difundieron sitios como TMZ eran impactantes y daban sentido a la salida de los tres desde el hotel, cuando Jay Z se toca la cara, específicamente donde había sido agredido.
Al día siguiente, Beyoncé tuvo que emitir un comunicado donde aseguraba que las cosas se habían arreglado entre los tres, “pasando página como una familia unida”, pero sin revelar la razón.
Años después se sabía la verdad a través de Lemonade, el álbum de Beyoncé, y 4:44, el disco respuesta que hizo Jay Z.
Una infidelidad del rapero hizo que la furia de la cantante afroamericana sacara su furia esa noche, defendiendo a su hermana, sin importar nada, indicó Vanity Fair.
Solange y Beyoncé Knowles triunfan por separado, pero siempre están juntas
El incidente es recordado cada año que Beyoncé no va a la Met Gala, sin embargo, es sólo una mancha en un historial impecable de las dos, ligadas al éxito musical.
Esto porque mientras Beyoncé llena estadios con su gira mundial, Solange Knowles también hace historia, como cuando en 2022 se convirtió en la primera mujer negra que compone para el ballet de Nueva York, consignó Europa FM.
Con una imagen sentada en uno de los salones del Lincoln Center, indicaba a través de su cuenta de Instagram, “Muy emocionada de anunciar que he compuesto una partitura original para el New York City Ballet 🖤 coreografía de Gianna Reisen, partitura interpretada por la City Ballet Orchestra”.
Aquí se mezclaban sus dos pasiones, la música, pero también el baile, recordando sus años de danza junto a su familiar en Destiny’s Child o cuando incluso interpretó videoclips de The Weeknd.
Las ‘Knowles’ siguen unidas y no dudan en mostrar el orgullo por la otra en cada oportunidad que tienen, mostrando que esa lealtad que se vio a través de la violencia hace 10 años, aunque no era la forma, es más fuerte que nunca.