En un video de tres minutos publicado en su perfil en Instagram, Jamie Foxx se refirió por primera vez al severo cuadro de salud que lo llevó a ser hospitalizado de urgencia en abril pasado.
“Fui al infierno y regresé”, resumió el actor en el emotivo registro, donde también asegura que ya está en vías de recuperación.
A pesar que a tres meses del hecho aún no se hace público el diagnóstico, Foxx explicó parte de los motivos del hermetismo: “Pasé por algo por lo que pensé que nunca pasaría, y sé que mucha gente estaba esperando o quería escuchar novedades, pero para ser honesto con ustedes, simplemente no quería que me vieran así”.
Luego, el protagonista de “Django Unchained” agregó: “Quiero que me vean reír, divertirme, hacer una broma, hacer una película, un programa de televisión… No quería que me vieran con los tubos saliendo de mí y tratando de averiguar si iba a poder lograrlo”.
De acuerdo al artista de 55 años, el “camino hacia la recuperación también tuvo algunos baches, pero voy a regresar y ya puedo trabajar”.
Ya al final del mensaje, Foxx agradeció las muestras de apoyo recibidas y también el trabajo del equipo médico que lo atendió. “Agradezco a todos los que oraron y me enviaron mensajes”.
“(Mi hermana) lo mantuvo hermético, no dejaban salir nada (ninguna información sobre su estado médico), me protegían. Y eso es lo que espero que todos puedan tener en momentos como estos”, comentó el actor, quien se encontraba en pleno rodaje de “Back in Action” junto a Glenn Close y Cameron Diaz al momento de su hospitalización.