El rapero Tekashi 6ix9ine, quien arriesgaba cadena perpetua en Estados Unidos por varios delitos federales, logró un acuerdo con la justicia.
Según consigna TMZ, el juez Paul Engelmayer lo condenó a 2 años de cárcel, de los cuales se descontarán los 13 meses que lleva en prisión preventiva, por lo tanto, quedará en libertad a fines de 2020.
Una vez que salga, estará en libertad vigilada durante 5 años, y tendrá que completar un servicio comunitario de 300 horas, junto con pagar una multa de 35 mil dólares, es decir, unos 26 millones de pesos.
El rapero de 23 años, cuyo nombre real es Daniel Hernández, fue detenido en noviembre del año pasado y se declaró culpable de nueve cargos. Tras eso, quedó a la espera de una nueva sentencia que podía alcanzar los 47 años en prisión, a menos que declarara contra los miembros de una peligrosa pandilla llamada Nine Trey Gangsta Bloods con la que estuvo vinculado. Al acceder a este acuerdo, logró esta notable reducción de condena.
Entre los delitos que se le imputaron, estaba la autoría intelectual en un tiroteo en el que una mujer inocente resultó herida. En este caso, el rapero se ofreció a pagar todos sus gastos médicos.
“Su cooperación fue impresionante. Estaba cambiando el juego. Fue completo y valiente”, aseguró el juez Paul Engelmayer en el juicio realizado en Manhattan, considerando que estaba muy expuesto a represalias de la banda delictual al delatarlos.
Cabe destacar que antes de conocer su sentencia, el rapero dijo estar arrepentido de haberse unido a esa pandilla y pidió perdón a su familia, sus seguidores y quienes fueron afectados por sus acciones.
“No soy una víctima. Me puse en esta posición desde el primer día”, señaló Tekashi 6ix9ine, añadiendo que “hice muchas malas elecciones en la vida, pero eso no me convierte en una mala persona”.
“Estoy contento de que el público haya podido verme lidiar con las consecuencias de mis acciones porque siento que esto arroja una luz sobre lo que puede venir de la afiliación a una pandilla”, expresó.
Los fiscales también admitieron en una carta dirigida al juez que la cooperación de Tekashi “fue extraordinaria, increíblemente significativa y extremadamente útil”, pues pudieron dar con varios delincuentes peligrosos. Además, indicaron que al declararse culpable, otros acusados también lo hicieron. Además, destacaron el hecho de que el artista lo hizo, pese al riesgo que implica para él y sus cercanos.
De hecho, antes de que saliera a la luz pública su colaboración con la justicia, Hernández hizo que su familia se trasladara a otro domicilio para mayor seguridad. Asimismo, las autoridades procuraron que el rapero fuese llevado a una cárcel sin pandilleros.
“No hay duda de que la vida del acusado nunca será la misma debido a su cooperación en este caso. Él y su familia tendrán que tomar precauciones adicionales de seguridad cuando estén en público para evitar posibles represalias de otros”, señalaron los fiscales.
En su testimonio, Tekashi 6ix9ine señaló que su rol en Nine Trey era “seguir haciendo éxitos y ser el apoyo financiero para la banda… para que pudieran comprar armas y cosas así”. A cambio de esto, la banda impulsó su carrera. “Tengo la credibilidad de la calle. Los videos, la música, la protección, todo lo anterior”, indicó.
Nacido en Nueva York, Hernández vivió con sus padres -de origen mexicano y puertorriqueño- hasta que su papá fue asesinado cuando tenía 13 años. Este episodio de su vida lo mantuvo con una grave depresión.
Una vez que fue dado de alta del hospital psiquiátrico, el joven fue expulsado del colegio por mal comportamiento, según contó en entrevista con No Jumper. Luego se involucró con el tráfico de drogas, desde cannabis hasta heroína, siendo encarcelado muy joven.
En 2015 fue arrestado por distribuir videos de una menor de edad realizado una felación a uno de sus amigos, incluyendo las imágenes en un video musical.
A los 18 lanzó su carrera musical, alcanzando éxito mediático con su canción Gummo en 2017, llegando al puesto número 12 en el US Billboard Hot 100. Desde ahí, sus canciones se convirtieron en un éxito tras otros.