Rumores de infidelidad han rondado al príncipe William y Kate Middleton desde que comenzaron su relación en la universidad. Sin embargo, la situación empeoró hace algunas semanas cuando comenzó a circular una foto que confirmaría supuestamente aquella especulación.

En la borrosa imagen se ve a quien parece ser el duque de Cambridge en una discoteque conversando con una joven de cabello oscuro.

Luego que apareciera en Twitter, la foto comenzó a dar la vuelta al mundo, y diferente medios la publicaron asegurando que era la confirmación de las especulaciones lanzadas por la revista In Touch, que aseguró que William había engañado a Kate con su amiga y vecina Rose Hanbury, una aristócrata también conocida como la marquesa de Cholmondeley.

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Si bien quien aparece en la foto luce como William, esta imagen no es actual, sino que se remite a un video que lanzó el portal TMZ y el diario británico Daily Mail, en 2017.

En la secuencia se puede ver supuestamente al príncipe con un vaso en la mano y bailando en el centro nocturno Verbier en Suiza. Posteriormente aparece hablando con una joven desconocida, lo que por supuesto dio pie a habladurías.

La respuesta de William

Tras la polémica que ha acaparado portadas en todo el mundo, y ante la cual el palacio de Kensington no ha querido referirse, el duque tomó cartas en el asunto.

Para ello contrató a la firma de abogados Harbottle and Lewis, quienes ya habían trabajado con el príncipe Carlos en 2006, cuando se acusó a un diario de hackear el teléfono de William y Harry; y en 2010, cuando se pidió detener el acoso contra Kate Middleton.

En esta oportunidad el bufete emitió una carta negando los rumores de infidelidad. “Además de ser falsa y altamente dañina, la publicación de especulaciones falsas sobre la vida privada de nuestros clientes también constituye una violación de su privacidad en conformidad con el Artículo 8 de la Convención Europea de Derechos Humanos”, sentenciaron, según asegura el portal Daily Beast.

Si bien no queda claro si los duques tomarán acciones legales contra las publicaciones que lanzaron la información, los expertos descartan que pueda ser así ya que no es la tónica de la familia real.