La monarquía británica se ha moldeado y adaptado a los tiempos durante siglos para sobrevivir, sin embargo, una de las crisis más grandes que tuvo que enfrentar fue la muerte de la princesa Diana en 1997.
El repentino fallecimiento de la esposa del príncipe Carlos, puso a la reina Isabel II en una encrucijada entre preservar la tradición y el protocolo o mostrar la humanidad que su pueblo le pedía.
La Reina optó por lo segundo, y envió un mensaje a la Nación dando un poco de consuelo a sus tristes súbditos, quienes simultáneamente comenzaron a desarrollar un profundo odio contra Carlos y su eterna amante, Camilla Parker Bowles.
Para la mayoría de la gente, la infidelidad del príncipe era imperdonable y a Camilla se le responsabilizaba de haberse inmiscuido en el matrimonio de Diana hasta destruirlo completamente.
Aunque con los años la animadversión contra la pareja ha disminuido, una parte importante de los ingleses no aprueba que la mujer llegue a convertirse en Reina cuando Carlos ascienda al trono, tras la muerte de Isabel II.
Así al menos lo dejó en claro una encuesta realizada en 2017 por el diario inglés Express, donde el 67% de los participantes se opusieron a esta idea, y sólo el 19% creía que la mujer era apta para el título. El porcentaje restante simplemente no respondió.
¿Ser o no ser?
Camilla y Carlos se casaron legalmente en 2005, ocho años después de la muerte de Diana, y con el consentimiento de la Reina, quien no asistió a la boda.
Gracias a esta unión (la primera por el civil de la familia real), la mujer se convirtió en Duquesa de Cornwall y Princesa de Gales, aunque este último título no ha podido utilizarlo por la asociación que tiene con Lady Di.
Dado que Camilla es separada (y que además no cuenta con el apoyo popular), también se creó para ella un nuevo estatus que le será otorgado cuando su esposo asuma como rey.
Cuando Carlos acceda al trono, ella pasará a transformarse en la primera ‘Princesa Consorte’ de la historia de Inglaterra, rompiendo así con la tradición que dictaba que la esposa del monarca gobernante era nombrada inmediatamente Reina Consorte.
Pero pese a que esta información fue confirmada por el palacio de Buckingham tras la boda de la pareja, diferentes informes de prensa afirman que el príncipe habría cambiado de opinión y querría cumplir el anhelo de su mujer. “Cada rey tiene a su reina”, habría dicho el príncipe de Gales.
Por lo tanto, como soberano y jefe de Estado, quien tiene la última palabra y el poder de convertir a Camilla en Reina, es solamente él.
“Aunque la línea oficial sigue siendo que la duquesa de Cornwall sea nombrada ‘princesa consorte’, cuando el príncipe Carlos ascienda al trono, la elección es de él y será él quien deba tomar la decisión a menos de un día del fallecimiento de la Reina”, señaló a Express Richard Fitzwilliams, experto en temas de realeza.
Dicha decisión, sin embargo, tampoco será fácil pues lo enfrentará con sus propios hijos. Según el periódico, para poder cumplir su cometido, necesitará de su lado a los príncipes William y Harry.
Según Fitzwilliams, el futuro Rey requerirá del apoyo de ambos jóvenes para cambiar el parecer de la opinión pública, pero según fuentes cercanas a la familia real, ninguno de ellos estarían muy de acuerdo en convertir a Camilla en Reina, dada la historia de traición que existe con su madre.
Conscientes de esta problemática, y debido a que es poco probable que Carlos abdique a la Corona en favor de William, la familia real comenzó hace varios años a tratar de limpiar la imagen de la Camilla.
En 2016, la Reina también la nombró miembro de su muy Honorable Consejo Privado, y además empezó a tener un rol más activo en los diferentes compromisos a los que asiste.
En el último tiempo, también se ha mostrado más amable y sonriente con la gente, además de muy cercana a algunos miembros populares de la realeza, como Meghan Markle.
Pero todo ese esfuerzo se esfumó en 2017, cuando el palacio envió una propuesta para que Camilla pudiese utilizar el título de Princesa de Gales, lo que no llegó a buen puerto, según consignó Daily Mail.
El plan coincidió con el vigésimo aniversario de la muerte de Diana y el cumpleaños 70 de la duquesa. “La extraordinaria efusión de afecto hacia la difunta princesa Diana durante gran parte de 2017 confinó rápidamente esa idea al basurero”, afirmaron.
Finalmente, dado que el rey de Inglaterra también el jefe de la Iglesia, y ellos no tuvieron una ceremonia religiosa, el plan de la pareja tampoco podría seguir adelante.
Por lo tanto, a menos que Carlos decida ir en contra de la corriente y la opinión del mundo entero, incluyendo sus hijos, es poco probable que Camilla se transforme en Reina.