Nattanan Kanchanaprat | Pixabay

De menos a más y en simple: así puedes hacer crecer tu plata y alcanzar la "estabilidad financiera"

06 octubre 2024 | 07:35

Guardar plata en una alcancía, bajo el colchón o en un fondo mutuo son de los primeros consejos que se suelen manejar en nuestro país respecto al manejo del dinero.

Y si bien no está para nada mal (siempre es mejor ahorrar un poco que “despilfarrar” todo), hay más acciones que se pueden tomar para construir un “buen vivir” o estabilidad financiera.

Sin embargo, también está el otro extremo, donde muchos de los denominados “gurús” de internet llaman a las personas a comprar sus cursos de “trading” o invertir en criptomonedas; instancias que presentan mucho mayor riesgo.

Para alguien que busca tomar el control de sus gastos y hacer rendir su dinero, las mejores acciones están más cercanas a lo expresado al inicio.

Sin embargo, si decidimos ir más allá, podemos hacer rendir aún más la plata, que crezca y quien sabe, tal vez llegar a un punto en que nos podamos llegar a ser llamados “millonarios”.

El primer paso para la estabilidad financiera

Conocido es el dicho de que “el mejor momento para invertir fue ayer, el segundo mejor es hoy”.

La intención del mismo no es desanimar a quienes, por ejemplo, no han tenido un hábito de ahorro, sino enfatizar en que mientras antes comiences a hacer crecer tu dinero, mejor.


Además, siempre surgen nuevas oportunidades que permiten hacer crecer nuestro patrimonio. Por ello, entre esperar el momento correcto a simplemente comenzar hoy y ahora, mejor lo segundo.

Y antes de comenzar a entregar consejos, lo primero que se debe dejar en claro es que sin un plan, no se puede avanzar en una estabilidad financiera.

Esto fue recalcado por el co fundador y CEO de Simplestate, Gonzalo Abalsamo, a nuestro medio asociado Perfil.

Una estrategia o plan financiero debe tener, al menos, estos tres pilares

Un objetivo: ¿Ahorro para la casa propia? ¿pagar estudio? ¿irse de vacaciones o lograr retirarse antes del trabajo?

Un presupuesto: Se debe controlar cuánto es la plata que ingresa y cuánto es la que sale. De esto último, se debe detallar a que cosas se va el dinero (gastos fijos, alimentos, regalos, fiestas, etc.). Así se puede ir re asignando recursos.

Un fondo de emergencia: Este paso es clave para comenzar a invertir. Se trata de un monto de dinero que cubra al menos seis (o en su defecto tres) meses de gastos básicos. Puede estar tanto a la mano (en la casa) como en una cuenta de ahorro de fácil retiro.

No es que se necesite un fondo de emergencia por cada objetivo financiero, sino que en caso de problemas o, por ejemplo, pérdida de trabajo, estos recursos permitan subsistir por al menos un tiempo.

¿El momento de invertir?

Cubiertos estos puntos, ya se puede hablar en palabras mayores y pasar al próximo nivel: invertir.

Ello no tiene que ser necesariamente al punto de ser un “tiburón” de Wall Street, poniendo cientos de millones de dólares en empresas y procesos de compra/venta de acciones. Se puede empezar por algo muy simple como lo es un fondo mutuo o incluso una cuenta de ahorro (aunque técnicamente no cuenta como inversión), para luego pasar a algo más arriesgado como los ETF’s o acciones.

Y con todas las alternativas a la mano, una buena opción siempre será diversificar.

“No pongas todos tus ahorros en un solo lugar. La diversificación es clave para reducir riesgos y aumentar las chances de obtener buenos retornos. Se pueden combinar inversiones en bienes raíces, acciones, bonos y otros instrumentos financieros”, dijo Abalsamo a Perfil.

Piensa tres veces y pondera riesgos

La emoción por invertir puede conllevar a tomar más riesgos de los necesarios, y eso incluye las deudas innecesarias. Esto también aplica para los deseos por comprar más y más, endeudándose con la tarjeta de crédito y así entrando en un ciclo vicioso del que es muy difícil salir.

“Las deudas de consumo, como las tarjetas de crédito o préstamos personales con altos intereses, son uno de los principales obstáculos para alcanzar la independencia financiera”, aseguró el CEO de Simplestate.

Y a modo de conclusión, hay tres “tips” que sirven tanto para quienes son jóvenes y ya inician el camino de hacer crecer el dinero, como para aquellos que buscan hacer rendir lo más posible sus ingresos.

Lo primero es -tal como se mencionó antes- invertir prontamente, ya que “cuanto más temprano se empiece, más se multiplicarán los ahorros”.

Luego hay que crear la costumbre de invertir de forma regular, no importando si son montos grandes o pequeños de dinero. “Lo importante es la constancia”.

Y finalmente, para evitar dolores de cabeza, busca inversiones seguras y rentables. “No es necesario asumir grandes riesgos, existen opciones como los bienes raíces que, históricamente, han ofrecido buenos rendimientos con una estabilidad considerable”, apuntan desde Perfil.